Evangelina

18 5 3
                                    

Si bien el caso de Fellow podría considerarse como un intoxicación básica como un niño comiéndose la plastilina de la escuela, los padres de los Shroud no quisieron dejarlo pasar de lado; había estado rodeado de blot, tan cerca de un phantom por más que fuera su hijo, había estado en un grave peligro que por fortuna no tenía que llevar un tratamiento más que beber grandes cantidades de líquidos y dejar que un suero intravenoso se le colocara (sin contar el cono de la vergüenza por parte de Ortho por haberse expuesto en vez de ir a pedir ayuda).

Mientras de Ort fue llevado 3 niéveles por debajo de la cede para ser tratado, los científicos no tenían trato alguno con él, lo trataban como uno de los sujetos de prueba, solo necesitaría una letra para cortar lazos en definitiva con su familia; cuando de nuevo su phantom fue puesto a dormir, lo mantuvieron en una de las torres, en un nivel nuevamente bajo hasta que se decidió que estaba estable y podía volver a la superficie de la isla.


—¿por que siempre que termino en esta isla, me pones el cono?—  pregunto Fellow, no le importaba tanto el cono, le era incluso de ayuda para no ver si sus suegros buscaban como matarle.


—fui claro cuando dije que no te quería a solas con él—  respondió con recelo Ortho, revisando las últimas muestras recabadas   —por suerte fue una intoxicación menor, te traeré algo de caldo de pollo—


—eres tan encantador cuando te haces el indiferente conmigo pero en el fondo estas asustado y posiblemente me quieres golpear por ponerme en riesgo—  revelo con su gran animo tan característico.


—claro que estoy molesto contigo, los phantom buscan recipientes para consumir y seguir existiendo, por más débil que sea tu magia seguías estando en peligro—  tomo la orilla del cono para obligar al zorro a agachar la cabeza y viera lo preocupado de sus expresiones  —estaba preocupado, si tu condición hubiera sido un tipo 2 con secuelas y desarrollo de un phantom propio, no hubiera podido hacer nada, te perdería, así que sí, estoy molesto contigo—


—eres mi eclipse, necesitarían arrebatarte de mi lado para que dejara que un phantom me usara de recipiente—  entrelazo con delicadeza su mano con la de Ortho, llevándola hacía sus labios para dejar un sutil y cariñoso beso en el dorso de sus manos  —saltaría... ¿lo sabes? tienen el mismo lindo rostro, no iba a quedarme de brazos cruzados viendo que estaba pasándola mal, te imagine y por eso lo hice—


—no hagas locuras por amor—


Le quito aquel cono, notando que lo había ajustado de más en su impulso de enfado al saber que estaría en observación un par de días a pesar de que solo había sido una intoxicación menor; pudiendo estar en sus brazos, aliviado y contento por sentir las medidas de aquellos químicos que hacer estar a uno enamorado; no quería ser directo con el zorro, sentía que las medidas de Dopamina habían bajado por el estrés o factores externos como no saber llevar una cierta situación, que no tenía que ver con que Ort estuviera tan cerca de su novio, lo hacia celar el solo imaginar que era por él que Fellow no estaba detrás de él como siempre, siendo atento y cariñoso, se daba cuenta de lo mucho que se había acostumbrado a esos tratos y que los tuviera alguien más, en definitiva le hizo sentir miedo y cierto grado de arrepentimiento por no hacer nada más que esperar.

Cuando la noche comenzó a llegar, Idia y Lilia habían hecho algo para subir el animo de todos, prepararon la simulación de una lluvia de estrellas y un espectáculo de fuegos artificiales n uno de los jardines artificiales de la isla, el más cercano a un cuento que Lilia le había relatado a Idia la primera vez que vieron juntos las estrellas en una de sus citas.

El rey de los phantom (Twisted Wonderland Disney)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora