EL DESEO PROHIBIDO DEL PRÍNCIPE

ECOS DEL PASADO

Después de que mi hermano salió de la casa nos quedamos en la sala, mi madre aun permanece sentada con las manos en su cabeza, yo decido sentarme a su lado también para hablar con ella, tengo mucho que decirle, aunque no sé como empezar; Fernando por su parte se va a la cocina a preparar un poco de té para calmar los nervios, escucho como mueve los utensilios y yo solo puedo observar a mi mamá hasta que tomo el valor necesario para tocarla y llamar su atencion, eso me trajo recuerdos de cuando era niño y ella estaba distraída en algo, entonces yo la miraba hasta que me atrevía a tocar su vestido o su mano para que me hiciera caso.

-Mamá, yo...quiero agradecerte por lo que hiciste hoy, sin tu ayuda se que Abdel habría cumplido su palabra y sé que en este momento sientes mucho dolor en tu corazón por tener que confrontar a tu hijo mayor; además de agradecerte quiero pedirte perdón...por no saber hacer mejor las cosas y dejar que llegáramos a esto; no es mi intención que nadie sufra, yo solo quiero tener una oportunidad para vivir tranquilo con mi pareja y talvez seguir formando parte de esta familia-. Le dije a mi madre tomando sus manos entre las mías, ella me miro a los ojos y escuchó cada una de mis palabras en silencio hasta que terminé, luego me su expresión se volvió comprensiva.

-Hijo mío...no tienes que agradecerme, escucha, tienes razón al decir que estoy sufriendo, porque para una madre es imposible elegir ponerse del lado de alguno de sus hijos, siempre buscamos mediar entre ellos para que no se lastimen ni peleen; en mi caso, si siento dolor porque los dos tienen mi amor por igual, pero en este momento es mi prioridad protegerte a ti porque ahora eres el mas vulnerable y mi instinto me dice que sino lo hago algo malo podría pasar-. Yo la escucho mientras observo como las lágrimas salen de sus ojos y recorren sus mejillas dejando un camino de dolor.

-Tareck Habibe, yo se que no has hecho nada malo y que ese jovencito Fernando es una buena persona; quiero creer que los sentimientos que tienen los dos son sinceros y no es solo un capricho que después de que se sacie la pasión se terminará y luego de todo este escándalo solo quede recoger los cristales rotos que dejarán atrás-. Escucho atento su reflexión y sé que tiene razon al decirme todo esto y en dudar porque no es cualquier cosa, mi relación amorosa no es convencional y estoy arriesgando todo, por lo tanto debo demostrarle que estoy dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias.

-Mamá, nunca antes había estado enamorado, cuando Fernando llegó a mi vida yo era una persona que sólo vivía a la deriva, frívolo como nadie y abría las puertas de mi mundo a amantes que al final del día no me dejaban nada y solo me buscaban por cualquier cosa menos amor; yo no tenía problema con eso, pues estaba seguro de que aquí en Haidar me esperaba un matrimonio arreglado y ya estaba resignado a vivir al máximo hasta que ese momento llegara, Entonces conocí a Fernando y todo eso cambió; él me enseño a amar de verdad-. Mi madre me escucha atenta y yo quiero ser completamente sincero con ella, así que hablo con mi corazón en la mano.

-Yo solo quiero estar con Fernando, con él puedo ser yo mismo sin temor, nosotros nos enamoramos y pues no es una relacion superficial o pasajera; lo que sentimos es real, en menos de un mes cumplimos un año de conocernos y pronto tendremos un año como pareja y pues definitivamente es una relación seria y no pienso dejarlo por nada del mundo, aunque eso signifique renunciar a todo-. Al abrir mi corazón con mi madre siento que el peso que llevaba conmigo se esfuma, ella me sigue mirando y después acaricia mi rostro con su mano suave; acerca sus labios a mi frente dejando un beso cálido ahí, ese gesto tan dulce me devuelve la esperanza en cierta forma, me hace sentir que no todo esta perdido. Fernando llega de la cocina y le ofrece una taza de té a mi madre y luego a mí.

-Gracias dulzura, eres muy amable, desde que te conozco solo he sido capaz de ver virtudes en ti, mi hijo Tareck se volvio un hombre más centrado y mas responsable desde que está contigo, sé que eres una buena influencia-. Ella le dijo sonriente a Fernando, es fácil darse cuenta de que siente afinidad por él, eso me alegra, mi amado es un ángel y merece todo el cariño y respeto de quien lo conoce.