Aterrizamos en Haidar al anochecer, en el vuelo le explique a Fernando lo del mensaje de Abdel, él insistió en acompañarme pero yo me negué rotundamente y le pedí comprensión; necesito arreglar las cosas con mi hermano y debo aceptar sus condiciones para hablar con él, sin embargo, le pedí a mi madre que lo reciba en su casa para que no esté solo y angustiado; así que lo dejo con ella de camino al palacio.
Al llegar soy escoltado por la guardia real a las estancias privadas de Abdel, entré a la estancia donde se encuentra mi hermano mayor, él está sentado en un sillón de la terraza fumando Narguile, cuando se percató de mi presencia me hizo un gesto invitándome a sentar en el otro mueble que tenia en frente; yo obedecí y me senté esperando a que hablara, no lo veo desde hace una semana y la verdad es que no puedo evitar sentir expectativa por lo que va a decirme. Abdel me ofrece de su Narguile y yo acepto, ambos fumamos en silencio unos minutos, él no deja de observarme fijamente y yo la verdad solo puedo aguantar la tensión en silencio hasta que por fin empieza a hablar.
-Leí tu carta...estando en el desierto, ir con los beduinos y pasar tiempo conectado con nuestras raíces me hizo reflexionar en como actué ante esta situación, las palabras que escribiste para mi me hicieron darme cuenta de que te hice daño, de que hice que con mis acciones sintieras miedo de mi que soy tu familia, no debí insinuar que podría llevarte a prisión; sé que todo lo que pasó nos afectó de forma negativa como familia y que reparar esto será difícil y llevará tiempo; Tareck...Perdoname por mostrarte un lado de mi con el que preferiría haber batallado en secreto, mis frustraciones no son culpa tuya y siento remordimiento del momento amargo que los hice pasar a ti y a mi madre; recordarla de rodillas pidiendo clemencia me parte el alma, eso no debió suceder, espero que sepas perdonarme hermano-. Abdel guardó silencio después de decir estas palabras, yo siento que un peso se ha quitado de mi corazón; sin embargo aún así guardo silencio y él vuelve a hablar sacando un viejo álbum de fotos familiares que yo no recordaba que existía.
-Yo...quiero mostrarte algo, este álbum es de cuando todos éramos niños, le pertenece a papá, él me lo prestó cuando regresamos del desierto; eso me hizo recordar algo que pasaba cuando eras un bebé; desde que naciste nuestra madre no te pudo amamantar por mucho tiempo pues su embarazo fue complicado y eso la afectó, por lo que tuvieron que darte biberón muy pronto y eso es algo que odiabas, llorabas mucho y yo recuerdo que nuestros padres estaban muy preocupados por tu salud pues no aceptabas que nadie te diera el biberón; siempre batallaban para que te alimentaras y nadie lograba dártelo tranquilamente; excepto yo...un día al ver a mi madre desesperada yo te cargue y te lo dí, fue como un milagro, te lo tomaste todo y te quedaste tranquilo, desde entonces fué mi tarea alimentarte hasta que tuviste edad suficiente para comer solidos; en esta foto estamos los dos...ves?-. Mi hermano señala el álbum y en efecto hay una foto nuestra, Abdel esta sentado en una silla conmigo entre sus brazos tomando el biberón, él tendría siete años y yo apenas unos meses de nacido, imaginar a Abdel haciendo eso me hizo sonreí, pues yo hace poco lo hice también con su primogénito.
-Eso hizo que te convirtieras en mi hermano favorito, por eso llamé a mi hijo como tú, es algo que me da felicidad y no me arrepiento, cuando lo cargué por primera vez me recordo a ti; Tareck...siempre quise que tengas la vida que yo no puedo tener; pero tengo que confesarte que al crecer ese sentimiento se convirtió en un poco de celos, sentía que mientras a mi se me exigía más y más a ti se te permitían cosas que yo no podía ni soñar al ser el heredero del trono y yo viví con ese sentimiento por años, pero eso no es tu culpa y yo estoy perfectamente consciente de esto; es como tu dices aunque soy el heredero del puesto de nuestro padre nadie me obligó a aceptarlo pues es voluntario. Pero al ver que rompiste una barrera que nadie en nuestra familia ha traspasado antes, hizo que perdiera la razón por un tiempo y actuara de la forma en que lo hice-. Me quedé serio ante esta última confesión, pues siempre he admirado a mi hermano mayor y es dificil escuchar que se sintió mal por mi y que mi forma de vida le hizo tener sentimientos de celos por mi causa; pero fue mas doloroso escucharlo hablar sobre "traspasar una barrera" refiriéndose a la ilegalidad de mi relación con Fernando.
ESTÁS LEYENDO
EL DESEO PROHIBIDO DEL PRÍNCIPE
De TodoTareck es un príncipe árabe multimillonario que puede tener lo que quiera con solo pedirlo, pero ahora quiere algo que no puede tener, porque desear a su amigo esta prohibido y lo más peligroso es que su deseo es correspondido.