Una suave melodía y las luces de la oscurecida ciudad reflejándose en los cristales de las ventanillas del Maserati. Los ojos grises mirando a los marrones. Una mano en el volante y la otra entrelazada en la del castaño. Una sonrisa dibujada en cada rostro. Un denso aire de complicidad revolotea entre los dos.
En cada semáforo en el que se detienen, el azabache aprieta la mano del castaño, mientras le dedica una sonrisa. Las mejillas carmín y los labios ligeramente rosados, acompañados de una sonrisa tímida. Y cada vez que el auto acelera, se miran, se ríen...
Aparcan frente al alto edificio donde está el penthouse. Los ojos del castaño observan con asombro la tremenda edificación. El azabache se recuesta en el coche mientras observa al omega, que está encantado con las vistas.
-¿Te gusta? -pregunta llamando la atención del castaño.
-Mucho, es precioso.
El azabache truena sus dedos, mientras tiene la mirada fija en el castaño, que lo ve con los ojos llenos de brillo.
-¿Crees que es posible que nos escuchen desde aquí? -dijo acercándose a su espalda.
El castaño inclinó su cabeza hacia atrás, y cerró los ojos.
-No entiendo -dijo suspirando.
El azabache lo volteó y lo cargó, haciendo que sus piernas se enredaran en su cintura, y sin previo aviso empezó a caminar.
-Jae, nos caeremos -protestó el castaño.
El alfa apretó sus muslos y luego buscó su rostro.
-No te vas a caer, porque te voy a sujetar muy fuerte -una sonrisa ladina se esbozó en sus labios-, tan fuerte que vas a suplicar que pare.
Dan se sonrojó y escondió su rostro en el arco de su cuello. Jaekyung se echó a reír y siguió avanzando.
En el ascensor, el castaño seguía disfrutando del aroma de Jaekyung, respirando muy cerca de su cuello.
Al llegar, este avanzó hasta entrar en el enorme penthouse. Depositó lentamente el cuerpo de Dan en el suelo, quien estaba encantado con el lugar.
-Jae, ¿es hermoso en serio vives aquí tú solo?- estaba nervioso.
Jaekyung caminó pegándose nuevamente tras él y besó suavemente su cabeza.
-Eso de vivir solo puede acabarse el día que tú quieras, porque adoraría que vivieras aquí conmigo- dijo Jaekyung.
Dan se volteó y, poniéndose de puntillas, dejó un tierno beso en su frente.
-Lo voy a pensar- susurró en su frente.
Jaekyung tomó su rostro en sus manos y le dedicó una tierna mirada. Luego tomó una de las manos de Dan y la puso en su pecho.
-¿Sientes eso?- preguntó.
El castaño asintió.
-Dan, estoy nervioso...- el castaño se echó a reír y se mordió el labio.
-¿Por qué habrías de estarlo? El único que lleva 11 años sin estar con nadie soy yo, en todo caso, debo ser yo el que esté nervioso-dijo Dan.
Jaekyung se tapó un poco la boca y le dedicó una mirada lasciva. Se acercó a su oído y susurró.
-Esta noche, vamos a recuperar el tiempo perdido-lamió su oreja-tanto que no notarás la diferencia...
Dan paso saliva y apretó los extremos de las mangas de la playera del alfa.
Jaekyung caminó sin darle la espalda, sosteniendo sus manos, mientras le dedicaba sonrisas al castaño.
-Jae, te vas a caer- lo reprendía siguiéndole el paso.
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I'm back/Jinx
RomanceJoo Jaekyung conoció al amor de su vida a los 16 años: un encantador omega cuatro años mayor que él. Sin embargo, debido a actuar como un cobarde, perdió al omega que tanto adoraba. Un día, este se marchó sin dar explicaciones, rumbo a los Estados U...
