¿Quien es Midas King? [Midas King#4]

Capitulo 2

Niklas 

11 horas antes de conocer a Kaiko, 

o que Kaiko lo conozca a él-

Sentía unos besos húmedos en mis parpados a la vez que una dulce risa , abro mis ojos para encontrarme con el rostro de Anya, ella deja otro beso en mi rostro y la rodeo con mi brazo agarrando su cuerpo desnudo colocándola encima del mio. Eso le provoca una risa mientras nos tapo con la sabana hasta la cabeza.

—Debo irme a trabajar—susurra ella en mi oído, volteo mi rostro para verla y beso sus labios.

—Quedémonos aquí—pedí con la voz ronca rozando mi nariz con la suya—Quedémonos aquí por siempre.

La mano de ella acaricia mi pecho mientras que nuestros labios se rozaban, amaba el sabor de su boca a la mañana, y el olor de su perfume de flores.

—Niklas—susurra ella—Niklas, sabes que no estoy aquí ¿verdad? Debes despertarte.

Abro los ojos de golpe sintiendo mi corazón golpear con fuerza. Pero estaba solo. Mi cuerpo desnudo como acostumbro a dormir envuelto en las sábanas blancas, pero ninguna señal de ella. Hacía tiempo que no había señales de ella.

Giro mi cuerpo hasta la mesa de luz haciendo una mueca al ver que eran las siete de la mañana, esperaba poder dormir más tiempo. Me friego el rostro con fuerza mientras me siento en mi cama, suspiro volteando mi rostro al lado donde ella solía dormir.

Últimamente había estado soñando con ella, soñando con los recuerdos felices, con nosotros en la cama abrazados, nosotros besándonos, nosotros simplemente estando juntos creyendo que eso es lo único que necesitamos en la vida.

Mi celular suena en algún lado de mi habitación sacándome de los pensamientos, retiro las sabanas de mi cadera y comienzo a moverme desnudo en mi cuarto hasta encontrar los pantalones junto al bóxer, pateo la ropa y agarro el teléfono leyendo el mensaje de Dylan. Donde, como siempre, nos envía la agenda del día. Un dolor comienza a amanecer en mi cabeza mientras leo la apretada agenda que me espera el día de hoy. ¿Por qué carajo acepte trabajo por mi cuenta aparte de la banda?

Bloqueo el celular y camino hacia el baño echándome agua fría en el rostro, me decido por abrir la ducha y mientras espero que el agua caliente me contemplo un poco en el espejo. Hago una mueca viendo mi abdomen agarrando un poco de los abdominales, debería pedir más tiempo en el gimnasio. Me meto a la ducha quedándome un rato bajo el chorro masajeándome mi cuello, mi cabeza fantasea con ella, me tortura fantaseando con su cuerpo junto al mío en nuestras largas duchas juntos, me tortura haciéndome recordar las veces que le hice el amor aquí mismo. Cierro molesto las canillas y salgo de la ducha mojando todo el suelo, camino intentando no resbalarme hasta el armario de las toallas donde saco un buen par y en eso una pequeña bolsa de polvo blanco se cae. Aprieto los labios mirándola mientras me agachaba a recogerla.

La había ocultado porque no era lo suficientemente valiente para tirarla, y creí que esconderla en el armario donde usualmente no doy tanta importancia no la encontraría me haría olvidar de ella.

Pero no podía hacerlo. La voz de Julian diciendo que es una especie de medicina mágica me perseguía, era consiente del daño. Pero también soy consciente que necesito callar mi cabeza para poder seguir con el día. Me armo una línea y la aspiro sintiendo la descarga eléctrica en mi cuerpo, al alzar mi mirada al espejo me observo avergonzado, pero ya era tarde, camino a mi armario donde termino por vestirme, agarro mis cosas y me largo.