El partido.

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Apenas había comenzado a llover cuando Taehyung dobló la esquina para entrar en mi calle. Hasta ese momento, no había albergado duda alguna de que me acompañaría las pocas horas que iba a pasar en el mundo real hasta que empezar el partido.
Entonces vi el coche negro, un Sedán desvencijado, estacionado en el camino de la entrada de la casa de Karl, y oí a Taehyung muscullar algo, enfurecido, en voz muy baja.

Jackson Wang estaba de pie detrás de la silla de ruedas de su padre, al abrigo de la lluvia, debajo del estrecho saliente del porche. El rostro de Tommy se mostraba tan impasible como la roca mientras que Taehyung dejaba la camioneta junto a la acera. Jackson clavaba la mirada en el suelo, parecía mortificado.

-Esto...- la voz baja de Taehyung sonaba furiosa.- Esto es pasarse de la raya.-

-¿Han venido a avisarle a Karl?- aventuré, más horrorizado que enojado-

Taehyung se limitó a asentir. Respondiendo con los ojos entornados a la mirada de Tommy.
Al menos Karl no había llegado aún. Tal vez estuviéramos a tiempo de evitar el desastre.

-Déjame arreglarlo a mí.- sugerí. La mirada llena de odio de Taehyung parecía demasiado seria.-

Me sorprendió que accediera.

-Quizá sea lo mejor, pero, de todos modos, ten cuidado. El niño no sabe nada.-

-¿Niño? Sabes que Jackson no es mucho más joven que yo, ¿verdad?- Entonces, me miró, y su ira desapareció. Me sonrió.-

-Sí, ya lo sé.-

Suspiré.

-Haz que entren a la casa para que me pueda ir- me dijo- Volveré hacia el atardecer.-

-Puedes llevarte el coche, si quieres- ofrecí.-

Taehyung puso los ojos en blanco.

-Puedo llegar a casa más rápido de lo que puede llevarme este coche.-

No quería que se fuera.

-No tienes por qué irte.-

Me acarició el ceño fruncido y sonrió.

-Tengo que hacerlo.- Fulminó a los Wang con la mirada.- Una vez te libres de ellos, debes preparar a Karl para presentarle a tu nuevo novio.-

Se rio de la cara que puse: Supongo que se dio cuenta de lo muchísimo que me emocionaba la idea.
No es que no quiera que Karl supiera lo de Taehyung. Sabía que le caían bien los Kim y, ¿cómo no iba a gustarle Taehyung? Probablemente se mostraría impresionado... quizás incluso hasta niveles insultantes. Pero me daba la sensación de que era intentar forzar demasiado mi suerte. Intentar bajar aquella fantasía, que casi era demasiado buena para ser verdad, al lodaza de la aburrida vida mundana parecía poco prudente. ¿Cómo podrían coexistir ambas realidades a largo plazo?

-Volveré pronto.- me prometió-

Sus ojos volaron de nuevo el porche y entonces se acercó rápidamente para posar sus labios contra el costado de mi cuello. Mi corazón me empezó a dar brincos entre las costillas mientras yo también echaba una mirada al porche. La mirada de Tommy ya no estaba tan impasible, y sus manos se aferraban a los brazos de la silla.

-Pronto.- repetí, al abrir la puerta y saltar hacia la lluvia-

Podía sentir sus ojos en mi espalda conforme corría hacia el porche.

-Hola, Tommy. Hola, Jackson- los saludé con todo el entusiasmo del que fui capaz de fingir.- Karl se fue todo el día, espero que no lleven esperando mucho tiempo.-

-No mucho- contestó Tommy con tono apagado; sus ojos oscuros me traspasaron.- Solo queríamos traerle esto- señala la bolsa de papel que llevaba en su regazo.-

Crepúsculo K.T×J.JDonde viven las historias. Descúbrelo ahora