Capítulo 9

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(Martin)

No lo podia creer, ¡me habían cogido! Siento que vuelo, desde pequeño dedicarme a la actuación había sido mi sueño, y ahora es una realidad. El musical me había acercado mucho, y había sido una oportunidad increíble de combinar el canto con la interpretación, pero esto es otro nivel.

Como el papel es de reparto, no tendré horas interminables de ensayo y grabación, por lo que no tendré que dejar el musical de manera repentina. Ya les había avisado de los castings en su momento, sobre todo cuando pasé las primeras fases y se iba haciendo más probable. Había hablado con producción y dirección y, por ahora, pasaría a cubrir las suplencias en vez del rol principal, y poco a poco iríamos valorando mi disponibilidad. La verdad es que he tenido mucha suerte con el equipo del musical, me están apoyando mucho en esta etapa de tránsito.

Después de hablar con mi familia, les escribo a Ruslana y a Chiara, quedamos de celebrarlo esta noche, con cena y fiesta.

Nos encontramos directamente en el restaurante y les cuento todo del intenso día de hoy, desde que me han comunicado que he sido seleccionado, hasta la conversación con el musical y cómo ha quedado la cosa. Ellas están de acuerdo en que es la solución más justa con las dos partes, al menos por el momento. Les cuento también todo lo que sé de la trama de la película, aunque aún no tengo el guión entero y no he conocido al elenco completo.

Terminamos de cenar, y una botella de vino y otras tantas cervezas después, hacemos camino a la discoteca. Tenemos un par de discotecas a las que solemos ir, que nos sabemos libres de miradas indiscretas y podemos disfrutar a gusto.  Entramos e inmediatamente nos dejamos llevar por la música. Me encanta salir con ellas de fiesta, sobre todo con Rus tenemos la misma pasión y energía por el baile, nuestros cuerpos se adaptan al beat de manera natural, y bailamos como si nada a nuestro alrededor existiese.

Se me acercan un par de tíos, pero esta noche soy de ellas solamente. También tengo a un cierto maño imposiblemente guapo rondándome en la cabeza y haciéndome difícil fijarme en otras personas.

Me deshidrato. Les aviso a las chicas que voy a por una copa a la barra, y me encargan dos cervezas de paso. Cabronas. Me acerco y me parece distinguir una figura en la barra, es Denna. Siempre me ha caído muy bien, es una chica dulce y divertida, pero siendo tan cercana a Juanjo, hacía tiempo que no cruzábamos palabra. El par de copas que llevo encima me facilita la tarea y me acerco a saludarla.

—Denna, ¿cómo tú por aquí?
—Ostras, Martin, ¿qué haces aquí? Qué sorpresa.—Veo que mira a los lados buscando algo, pero finalmente me devuelve la mirada.
—Estoy con Rusli y Kiki, están en la pista. ¿Está Álex por aquí?
—Sí, sí, ha salido a fumar ahora, estamos con otros colegas en un reservado por allá atrás, cuando vuelva le digo y os pasamos a saludar.

Pero no hace falta que pasen porque justo está entrando Álex y dirigiéndose hacia la barra. Va con otros dos chicos que están hablando entre sí, y uno de ellos es Juanjo, cómo no.

Está muy guapo, con una camiseta negra sin mangas, vaquero oscuro y botas, se me cae la baba mentalmente. Hasta que se fija que estoy ahí y hago un esfuerzo por recomponerme. Álex también me ve, y después de una mirada de reojo a Juanjo, se acerca a mí con una gran sonrisa. En la academia habíamos tenido un vínculo fuerte, y siempre nos alegramos de vernos. Me da un abrazo sincero al grito de ¡manito! Juanjo se ha quedado atrás, hablando con el otro chico, que es bastante mono, casi de mi altura, pelo castaño muy corto y ojos claros. Finalmente Juanjo se acerca a mí y me saluda.

—Cuánta casualidad últimamente, ¿no?  De repente coincidimos por todos lados.—Me dice con una sonrisa de lado.
—Ya ves, eso es el destino que nos quiere juntar.—Me inclino para decirle esto en voz más baja para que nuestros acompañantes no lo escuchen. Él sólo sacude la cabeza con una sonrisa divertida. Me giro hacia el chico que no conozco y me presento.—Martin, encantado.
—Nil, igualmente.
—Perdona, no me di cuenta, Nil es uno de los bailarines que me acompaña en los shows, es un crack. Y tú, Nil, supongo que a Martin ya lo conoces, de OT y tal—interviene Denna con una risita ebria.

La cuadratura del círculo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora