16 otra vez

Agridulce

Disclaimer: Este capítulo tiene un caso particularmente turbio y crudo. No quiero herir susceptibilidades pero estábamos contando una historia en familia y me hizo mella. La ocupo de inspiración y mando luz a quién halla sufrido algo así.

Si eres especialmente sensible a temas como el abuso sexual y el infanticidio, y decides leerlo, por favor hazlo con cuidado. No es muy explicito, pero si especifico. 

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El vibrar de su teléfono le alertó...

02/02/xx

11:45 am

Reigen, Arataka 

Por favor, discúlpame, llegaré más tarde a la oficina, 

surgió algo. 

Sintió un sudor frío recorrer su espalda, no era normal que Arataka llegará tarde al trabajo. Su preocupación comenzó a elevarse, ¿y si había encontrado a los sujetos de la noche anterior? ¿Si había tenido algún ataque por parte del espíritu que no lograron exorcizar y que lo maldijo? ¿Si se había encontrado con otra amenaza?

El celular vibró de nueva cuenta. 

02/02/xx

11:47 am

Reigen, Arataka

No es nada grave, sólo tuve que ir de compras. 

Llegaré antes de las 3... eso espero. 

Confió en ti, Katsuya.

-Su café se va a enfriar- suspiró con desanimo el castaño. Serisawa había preparado el café. Sin embargo, las últimas palabras del mensaje le dieron el ánimo suficiente para poder hacerse cargo de los problemas o clientes que pudieran solicitar su atención durante las siguientes horas. 

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En un salón de la preparatoria Sal, la mirada del joven pelinegro se perdía en el cielo matutino, parecía tranquilo, pero dentro de sí, el hecho de no saber nada de su maestro más que el mensaje de la noche anterior le hacia revivir la culpa del hecho. 

-No, no es tu culpa - recordó las palabras de la rubia y el abrazo, sus mejillas se pintaron de carmesí, por suerte nadie la estaba prestando la atención necesaria como para darse cuenta de lo que sucedía. 

Cavilando en sus recuerdos, algo curioso había ocurrido en la mañana. Un mensaje de Tsubomi le había llamado la atención -"¿Necesitas ayuda?" - decía el mensaje, no entendía a lo que se refería pero contesto con un certero "Sí, por favor". 

- Bien - dijo el profesor - con esto terminamos la clase del día de hoy, recuerden que el día de mañana habrá examen y contará el 20% de su calificación final... Kageyama, distraerte con tanta facilidad no te servirá de nada en la vida - la voz del docente se escuchaba sutil pero seria. A continuación todos voltearon a ver al chico que no hizo más que asentir y disculparse con su profesor - Esta bien, nos vemos mañana.- 

-Definitivamente hay cosas de no cambian, ¿verdad? Kageyama-kun - le dijo sonriente Mezato mientras ocupaba el asiento de enfrente - Me gustaría saber que tanto piensas. 

-No, es nada, sólo estaba recordando algo... - un dejo de desinterés salió de sus labios. 

- Por cierto, ¿Qué harás mañana en la tarde? ¿Estarás ocupado con el trabajo? - sonrió con curiosidad después de cuestionarlo.