El hijo de mi padrastro 'Sukufushi'

04.

Megumi se levantó de la cama y empujó a Sukuna para safarse de su agarre.

-Esta bien, no presionare las cosas. Puedes buscarme cuando tú quieras-le dijo en un tono seductor.

Salió de la puerta y la cerró.

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Mientras Toji se recuperaba de su pierna rota, Sukuna comenzó a trabajar de medios tiempos en una fábrica, ya que era un muchacho joven y fuerte lo pusieron a descargar y llevar cajas a donde se lo solicitarán. Cuándo llegaba Megumi lo esperaba para que avanzarán a sus tareas pendientes, con solo unos días para que pudiera volver a la escuela debían ponerse al corriente.

Después que Toji se curará de su pierna volvió a casa. Se prometió así mismo no repetir algo así en su vida, además de tener a Satoru en abstinencia continúo llendo a su trabajo.

-Y por último está este último
ejercicio-señalo Megumi el último ejercicio de la hoja.

Sukuna volvió a tomar su lápiz y hizo el ejercicio.

-Ya está-avisó Sukuna.

-Es todo, terminaste-le dijo Megumi.

Sukuna soltó un suspiro y recargó toda su espalda sobre la silla.

-hace hambre, deberíamos salir a comer algo para celebrar esto ¿No?-

-Aun tengo tareas pendientes por
hacer-

-solo será una hora, no tardaremos más, lo prometo y...no volveré a abandonarte-

-Esta bien-acepto el menor.

Salieron de su casa y fueron en la moto de Sukuna a un pequeño bar de comida.

-Vengo aquí cuando se me viene en gana o el tiempo libre que me da la escuela-contó el mayor luego de que entrarán.

No parecía ser un mal lugar a diferencia del bar en donde bebió ese era todo lo contrario, se veía mucho más elegante además que la gente ahí era muy amable.

-!Hey, Sukuna!-

-¡Nos debes un juego de cartas! !anda a sentarte con nosotros a jugar!-dijo otro de los adultos mayores

-Nosotros invitamos-se ofreció otro de ellos.

La mayoría de la gente que estaba ahí eran ancianos, ¿Enserio venía aquí todas las tardes? Además es ¿Amigo de unos ancianos? No lo malinterprete, Megumi es muy respetuoso con toda la gente y más con personas mayores que él. Aún que ver a Sukuna relacionarse con ellos es algo que nunca se imagino.

-Que no te asuste, son buenas personas, enserio, te van a caer bien-le dijo luego de que llegarán a una mesa.

Una mujer se acercó a su mesa para tomar su orden.

-yo quiero una hamburguesa con
papas-le dijo Sukuna a la mujer.

-¿Y para el joven?-volteó a ver al menor.

-traigale lo mismo y dos jugos-le guiño un ojo.

Luego de anotar su pedido la mujer se fue a la cocina.

Los hombres que habían saludado a Sukuna se centaron en la mesa de alado para platicar con ellos.

-¿Dónde te habías metido niño? Hace un tiempo que no nos visitas-dijo uno d ellos a manera de broma.

-Lo se, pero últimamente he estado ocupado con... mis estudios-miro a Megumi con una sonrisa.

-Es bueno que sigas estudiando, seguro que pronto tendrás una buena
profesión-