El hijo de mi padrastro 'Sukufushi'

19.

-Esto se a vuelto un mal hábito tuyo-habló Sukuna con voz un poco ronca.

-¿A qué te refieres?-preguntó el menor un tanto confundido.

-Eres el primero en despertar y te vas de aquí, me abandonas, si fueras un poco más atento te quedarías aquí un rato más...-contestó Sukuna.

-No puedo hacer eso, Satoru o Yuji podrían llegar en algún momento y...-

Sukuna le interrumpió y jalo su mano para acercarlo a su pecho desnudo.

-Que eso sea lo de menos...-Sonrió el mayor, acarició la fina cintura de Megumi para luego envolverlo entre sus brazos.

Ese tipo de actitudes no eran común en Sukuna, pero tener un poco de minos y caricias tiernas luego de una ronda de sexo tampoco era tan malo.

-Megumi...-le llamó Sukuna casi en un susurró.

Megumi miro una vez más el rostro del mayor y acarició su mejilla, su vista se volvió cada vez más borrosa.

La imagen de Sukuna fue desapareciendo a medida que sus ojos parpadeaban, oh si, lo había olvidado... Seguía durmiendo.

"Despierta"

Megumi abrió los ojos, se quitó las sábanas de encima y miro su parte baja, tenía una pequeña erección.

"Maldición"

Decidió no hacerse cargo y se metió a bañar, debía cambiarse pronto para no llegar tarde a su primer día de clases.

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"Clase A-24"

Megumi entro al salón que le asignaron días antes, luego busco una silla libre para poder sentarse.

Pronto comenzaron a llegar más personas y todas las sillas fueron ocupadas. Al poco tiempo entro un hombre alto de cabello rubio, no hizo falta adivinar que era su profesora pues con el traje que vestía ya era muy obvio.
Se presentó ante todos y luego dio su clase con normalidad, así durante las siguientes horas diferentes maestros entraron para impartir sus clases.

En la hora del almuerzo busco un buen lugar para poder desayunar, cuando lo encontró se sentó en la banca libre para comer algo.

Nada era diferente a su otra escuela solo con la diferencia que eran más exigentes para sus materias. Megumi ya estaba acostumbrado a tratar con profesores así es por eso que no le sorprendió su actitud tan seria asia él.

Lo único incómodo era la forma en que los otros lo miraba, ¿Era muy obvio que venía de Tokio?, al parecer así era, pues desde que llegó a su salon sintió las miradas pesadas de algunos de ellos.

Entre ellos estába ese joven... Tadashi, fue el único que no lo miro con indiferencia seguramente por qué ya lo había conocido, aún así, pudo darse cuenta del interés que tenía por conocerlo. Era eso o tenía una rara forma de mirar a las personas.

Megumi tiro a la basura la bolsa donde trajo su sandwich y volvió a su salón, fue allí donde Tadashi se le acercó para hablarle.

-¡Megumi!...¿Me recuerdas?-

Aquel joven de mechas rubias se le acercó con una sonrisa.

-Si...tú eres...¿Tadashi?-contestó Megumi, lo miro un poco incómodo por su acercamiento.

-¡El mismo!-sonrió.

-¡Hey, ni te atrevas a acercarte a él!-le gritó una de sus compañeras de clase. -Tadashi es un conquistador y sus mejores presas son los nuevos-mencionó con burla.