ㅤㅤㅤㅤㅤ𝗹𝘂𝗰𝗲𝗿𝗼 one piece (2024).
ㅤporque la llamaban lucero por muchas
ㅤrazones; él pensó que era por sus ojos.
ㅤㅤㅤㅤㅤㅤ𝒍𝒐𝒗𝒆 𝒍𝒊𝒏𝒆 𝒕𝒓𝒊𝒍𝒐𝒈𝒚 ; 𝒗𝒐𝒍. 𝒊
ㅤㅤㅤㅤ☆ ͡ ݂ ⩇:⩇ ' ۫ 🌙 ࣪ 𓈒
ㅤㅤ𝗱𝗼𝗻𝗱𝙚 zoro queda totalmen...
୨ (2024) ࣪ 𓈒 ✧ 𝗹𝘂𝗰𝗲𝗿𝗼 ! " i can't be your love, cause i'm afraid. . . " made by @ch4erryyy
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Ⳋ ִ ࣪ 𝑨CTO UNO : 𝙨𝙚𝙖𝙨𝙤𝙣𝙨 ⸝⸝ 💭 𖠵ꜝ CAPÍTULO VI ★ ¡lucero vs la marina! él le entrega su corazón en el tejado.
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Le asustaba sentir que su corazón se aceleraba al pensar en él.
Había estado distraída últimamente; cada vez que navegaba hacia una nueva isla, sus ojos se perdían en el océano, e inconscientemente pensaba en él. Se quedaba en blanco cada vez que veía algo que le recordara a él. Fue ella la que se había ido, ¿por qué pensaba tanto en él de repente?
Incluso cuando luchaba, había veces en las que simplemente no peleaba como lo hacía usualmente. Comenzaba a odiar esa parte de ella. ¿Por qué simplemente Roronoa Zoro no podía desaparecer por completo de su mente?
Estaba en una isla de clima frío. Gracias a su abrigo holgado, podía esconder su látigo alrededor de su cintura y nadie lo veía. Había parado en esa isla para buscar algo de comida, tal vez algunos cupcakes. Luego de aquella conversación a ciegas con Zoro, se había dado cuenta de su gusto por aquel postre. Nunca lo había pensado antes, puesto que nunca había tenido el tiempo. Y ahí estaba, queriendo degustarlos gracias al cazarrecompensas.
—Que tenga un lindo día, señorita —le agradeció el repostero, con una sonrisa que escondía segundas intenciones—. Ella se me hace conocida, pero, ¿de dónde...?
—¡Sí, a mí también! Esos ojos no son fáciles de olvidar, me parece que la vi en un cartel de la marina...
«Oh, no» pensó, aunque siguió su camino, fingiendo que no había escuchado nada.
—Tal vez deberíamos decirle a la marina que la vimos.
Dobló en un callejón en el preciso instante que escuchó eso. La habían descubierto.
Se puso la capucha de su abrigo después de atarse el cabello en una coleta alta. Lastimosamente, no tenía algunos lentes de sol que pudiesen cubrir sus ojos fáciles de reconocer. No corría, no quería llamar la atención, pero su ritmo al caminar era rápido. Solo tenía que llegar a su pequeño barco y seguir con su camino, era tarea sencilla.
—Señorita, disculpe, ¿podría quitarse la capucha?
Ella apenas pudo ver de reojo a alguien vestido con el uniforme de la marina. Como si no lo hubiese escuchado, siguió con su camino, notando que el chico la seguía.
—¡Señorita! ¿No me escuchó?
Cuando el oficial la tomó de la muñeca, ella se giró y lo miró.
