#9 María Juana *

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#9 María Juana *

*Puedes saltarte este capítulo si no eres fanático de este tipo de contenido, pero al final del capítulo hay un poco de trama y una pregunta para todos.*

*Punto de vista de Allen*

Usé mis manos para recorrer la piel suave, delicada y húmeda de Jane; sus ojos azules y llorosos se cerraron tímidamente.

Mi boca se movió para besar el suave y reluciente abdomen de la hermosa niña. Ella se estremeció cuando mis labios encontraron su piel, dejando escapar un leve gemido. El sabor de su piel estaba fresco del baño, pero rápidamente se calentó, emitiendo la fragancia de una mujer excitada.

"Hace cosquillas", murmuró la pelirroja con una voz parecida a la de un mosquito y el rostro sonrojado. Mi mano fue a su boca y toqué esos tentadores labios rojos. Ella abrió la boca y me lanzó una mirada ligeramente burlona.

"Hace un momento, ni siquiera podías mirarme, niña traviesa", murmuré, sin aliento, acercándome a su boca.

"Hace un momento no era tuya", respondió ella con un tono juguetón y una sonrisa. Nuestros labios se encontraron en un beso que no sólo fue apasionado sino cálido, como si confirmara los sentimientos del otro.

Esta fue una experiencia nueva para los dos. No me siento avergonzado por ello, pero estoy agradecido de haber investigado cómo manejar esta situación adecuadamente.

Mis manos trazaron sus curvas, haciéndome darme cuenta de lo bien desarrollada que estaba. Sus pechos temblaron mientras se retorcía, pero no intentó escapar de mi toque. En cambio, Mary Jane me abrazó y me invitó a engullir su boca una vez más.

Nuestras lenguas se entrelazaron, su boca tan dulce como la miel. Podría ser mi ilusión nacida del deseo, pero sentí unas grandes ganas de besarla más.

Ella correspondió del mismo modo entre suaves gemidos. Sus manos viajaron hacia abajo y recorrieron mi pecho, sintiendo mis músculos.

Ella abrió los ojos, desconcertada, mirándome con complicidad. "Señor Walker, parece delgado, pero no es flaco".

"¿Te estás burlando de mí?" Respondí, desabotonando la camisa de MJ. Su piel brillaba por el sudor y se notaba a través de la tela.

MJ abrió los ojos y me miró. "Es tu culpa; a veces hablas de manera bastante formal, como un caballero".

Con una leve sonrisa me separé de ella y me quité el suéter que usaba para dormir.

Le guiñé un ojo a MJ. "No sé por qué, pero me cuesta ganar músculo. He trabajado para al menos no parecer patético en las piscinas".

Sintiéndose avergonzada, Mary Jane miró hacia otro lado. Intentó actuar de forma seductora, pero era virgen en todos los sentidos.

"No seré víctima de tus burlas", dijo, con una mirada ligeramente molesta pero tímida, usando delicadamente sus manos para explorar mi cuerpo, luego usó su boca para besar mi cuello, sacando su linda lengua y deslizándose sobre mi piel.

"Ya veo..." Le dejé tomar la iniciativa y ella me dio la vuelta, ahora tumbada encima de mí.

MJ yacía sobre mi pecho, el calor de su cuerpo hacía que su piel clara se volviera rosada en algunas áreas. Usó sus dedos para alcanzar mi virilidad, mientras sus suaves pechos se presionaban contra mí.

MJ dudó en tocarme, con los labios ligeramente fruncidos. Finalmente, haciendo acopio de valor, comenzó a acariciar al dragón medio despierto.

Sus ojos se movían de un lado a otro, incrédula lo que estaba haciendo, pero decidida, no dejó de acariciarme por encima de mis pantalones.

Transmigro de DC en MarvelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora