#26 La reacción del mundo ante Allen Walker
Doomsday era una criatura aterradora; sus rugidos congelaron los cuerpos de quienes los escucharon. Su apariencia gris, sus ojos rojos y esos huesos más duros que diamantes que sobresalían de su cuerpo le daban un aspecto de pesadilla.
Y su poder... un poder tan inmenso que hizo sangrar a Superman con sólo un par de simples golpes, sin kriptonita, sin magia, sin poderes extraños, pura fuerza y poder. Doomsday logró infundir miedo en todos los que lo vieron.
Un monstruo entre monstruos, con una inmortalidad capaz de resucitar de la muerte, con la capacidad de adaptarse a los ataques de su oponente. Independientemente de si eran físicos, energéticos, cósmicos o mágicos, con el tiempo suficiente, Doomsday se adaptaría y se volvería inmune o, peor aún, se volvería más poderoso.
Era un monstruo tan aterrador, y sus estragos fueron transmitidos a todo el mundo de DC por valientes reporteros y algunos videos grabados por civiles. Sin embargo, a diferencia de Marvel, su vista era más distante y no podían ver todos los detalles.
Pero eso no impidió que todos los seres vivos del planeta sintieran el tipo de batalla que se desarrolla en Metrópolis.
La gente fue testigo de cómo su superhéroe más icónico y presumiblemente más poderoso, Superman, resultó gravemente herido una y otra vez.
También vieron un nivel de poder que Superman nunca antes había mostrado, llegando al punto en que esta batalla representó una amenaza para todo el planeta.
Inicialmente, los villanos estaban extasiados al ver a Superman sangrar, sufrir y tener la posibilidad de perder. Sin embargo, a medida que la lucha se intensificó y lo que estaba en juego, todos guardaron silencio porque esta no era solo una batalla clásica entre superhéroes y villanos; fue una lucha a muerte con el destino de la Tierra en juego.
Si Doomsday ganaba, la Tierra podría despedirse, así de simple. Claro, hay oponentes en esta Tierra de DC que podrían enfrentarlo, pero con cada segundo que pasa, Doomsday se volvió más poderoso. Después de una hipotética victoria contra Allen y Superman, alcanzaría un nivel de poder demasiado alto para ser derrotado por nadie más.
Si bien hay villanos malvados, sólo una pequeña parte estaría feliz de destruir su mundo. Quiero decir, este es su planeta, su hogar y el único en el que habita la mayoría. ¿Por qué lo destruirían?
Una cosa es violar la ley, robar o incluso matar, pero destruir la Tierra es diferente: es una balanza que la mayoría de los villanos no están dispuestos a inclinar. Muchos de ellos comenzaron a animar a Superman y Allen en su lucha contra Doomsday.
La aterradora verdad sobre la existencia de Doomsday hizo que el joven desconocido que luchaba junto a Superman fuera aún más impresionante, pareciendo ocasionalmente más poderoso que el Hombre de Acero y Doomsday.
Con una gabardina blanca que parecía desafiar la gravedad y moverse a voluntad, emitiendo un tenue brillo blanco, el joven parecía pequeño en comparación con Doomsday. Sin embargo, el joven de cabello blanco como la nieve se paró frente al abrumador monstruo apocalíptico.
Siguió una lucha feroz, una batalla en la que nadie podía intervenir sin arriesgar su vida.
El Rojo de Allen sorprendió a la gente con su poder destructivo.
El azul hizo temblar a muchos mientras veían una parte de Metrópolis fácilmente tragada por el cielo.
Pero incluso con una demostración tan masiva de poder, nadie temía a Allen por sus acciones durante la pelea.
