#129 La secretaria traviesa Poison Ivy y el secreto de Harley Quinn
Allen estaba a punto de castigar a Ivy, pero detuvo sus movimientos por un momento y miró hacia la puerta de la oficina.
'Bueno, parece que vino Harley, no, en este momento es Harleen... es bastante peculiar encontrarla antes de que se convirtiera en Harley Quinn...' pensó Allen mientras sonreía lentamente.
Todo el mundo sabe que al Joker solo le importa Batman, muchas veces en muchas historias trata a Harley como algo conveniente y desechable. El Joker la ha abandonado a su suerte, la ha utilizado como cebo, como escudo e incluso ha intentado matarla.
Si el Joker tuviera que elegir entre salvar a Batman, el tipo que constantemente busca encerrarlo en un calabozo, y la mujer que está dispuesta a hacer cualquier cosa por él, sin dudarlo, la dejaría morir.
El Joker hizo un gran trabajo lavando el cerebro a Harleen, hasta el punto en que Harley quedaría irreconocible de su antiguo yo. Sin embargo, no todo el mérito es del Joker, la joven Harleen tenía predisposición a aceptar la locura hasta cierto punto.
Allen no tenía ningún remordimiento por mantener a Harleen alejada del Joker, sin embargo, en ese momento, Allen no tenía tiempo para lidiar con la encantadora Harleen.
Allen dejó de mirar a Harleen y se centró en Ivy.
...
Sus ojos verdes irradiaban embriaguez y deseo lujurioso, su respiración acelerada y un ligero sudor cristalino en su piel revelaban su impaciencia, y su boca dejaba escapar jadeos insatisfechos.
Ivy era una mujer llena de lujuria.
Poison Ivy era una belleza voluptuosa irresistible.
Sin embargo... Allen permanece indiferente ante esta mujer que es una encarnación de la lujuria.
Con indiferencia, Allen se inclinó hacia delante, apoyando su codo derecho sobre el escritorio y tocando la mejilla de Ivy con su mano izquierda.
"¿Estoy delicioso?" Dijo Allen mientras extendía sus dedos para capturar la lengua de Ivy y jugar con ella.
Ivy se emocionó más y dejó escapar un suspiro visible, sus ojos casi se convirtieron en corazones mientras Allen se burlaba de ella.
'¡Esto está mal!' Harleen tragó saliva mientras miraba, no podía creerlo. Si bien una relación entre una secretaria y un jefe es común e incluso esperada, la relación que ella presenció no era entre un hombre y una mujer ni entre amantes.
'¡¿Cómo puede ser una perra tan descarada como para soportar ese trato ?!' Harleen no sabía si tuvo suerte o mala suerte porque, con este tipo de escritorio sin tapa frontal, podía verlo todo.
...
"Haa~ Mhm~ Maestro~" Ivy usó su lengua suave y húmeda para lamer los dedos de Allen.
"Me llamas maestro pero no me respetas... intentaste matarme, ¿qué debo hacer contigo?"
"Hmm~ Hahh~ Lo siento~" se disculpó Ivy, levantando la vista con una mirada lastimera que provocó el deseo protector de un hombre.
Harleen se quedó sin aliento ante eso, Ivy no era solo una mujer a sus ojos sino propiedad de Allen, ¡y estaba feliz por eso!
'¡Qué descarado! ¡Kuh!' Harleen sintió un escalofrío que le entumeció el cuerpo e inconscientemente apretó sus piernas al ver tal nivel de perversión. Aunque tenía los ojos pegados, no apartó la mirada ni por un segundo.
...
Allen encontró divertida la actitud del joven Dr. Quinzel, la Harley Quinn que recordaba habría entrado a la oficina sin vergüenza, tal vez se habría burlado de Ivy, y dependiendo de su relación con Joker en ese momento, incluso podría haber sugerido unirse.
