#57 Loki y Thor: hermandad rota
Tony estaba asombrado por las capacidades de Prime, pero al final era un prototipo de armadura, y una de sus principales deficiencias era que carecía de una forma adecuada de alimentarla.
El reactor ARK secundario de Tony estaba a menos de la mitad desde el ataque, y su reactor principal estaba al veinte por ciento. Aún así, debería valer la pena porque el ataque fue tan poderoso que sería un milagro si Loki saliera ileso.
En cuanto al ejército de golems, se detuvieron en seco como si hubieran perdido el conocimiento, aunque eso no impidió que Hulk siguiera arrasando con todos ellos.
Mientras tanto, Natasha dejó de disparar y se apoyó en su rifle, que, apoyado en el suelo, tenía casi su misma altura. "¿Son como un hormiguero?" Natasha observó el extraño comportamiento de los golems y concluyó.
Las hormigas dependen totalmente de tener una reina. En el momento en que la pierden, el hormiguero está condenado a desaparecer.
"Bueno, eso nos ahorra problemas", comentó Clint, guardando su arco. "A este paso, habría tenido que usar palos como flechas".
...
Dentro de un cráter, Loki se recostó, mirando el cielo despejado y el sol alto. Su ropa estaba quemada en varios lugares y tenía algunas heridas, pero nada grave.
Un vago recuerdo cruzó por la mente de Loki. Estaba en sus primeros años, él y Thor solían cazar; fue una de las pocas actividades que ambos disfrutaron sin importar quién ganara.
Una especie de liebre con cuernos de reno recorría el bosque a gran velocidad. Detrás de él, igualmente rápido, había una pequeña figura persiguiéndolo como un fantasma, sin perder ni un segundo. Era un cazador y una presa repitiendo el círculo de la vida una vez más.
"Eres mío", pensó el joven cazador mientras acortaba la distancia entre ellos. En su mano había un objeto largo con una punta metálica que brillaba a la luz del sol.
Sintiendo el peligro, la liebre aceleró, pero no pudo escapar. Con una sonrisa atrevida, la pequeña figura pisó el suelo y arrojó el objeto, que ahora era claramente una lanza. El viento silbaba alrededor de la lanza mientras cruzaba la distancia hacia la liebre reno.
"Esta vez no, hermano."
"¡¿Eh?!"
Un leve susurro entró en los oídos del joven cazador, sobresaltándolo. En ese momento, la presa fue robada y la liebre se elevó hacia el cielo gracias a una trampa en el suelo. La lanza se alojó en un árbol. La presa acabó colgada de una cuerda, luchando pero en vano, y simplemente se rindió.
"¡Maldita sea, Loki, era mío!" El cazador resultó ser un niño de cabello rubio y ojos azules, vestido con ropas claras y armadura de cuero.
"Un paso tarde, hermano, jeje", apareció detrás de él un chico de cabello negro, vestido con una armadura similar al chico que lo llamaba hermano pero de negro.
Eran Loki y Thor, los hijos de Odín, en sus primeros años. Aunque eran asgardianos, podrían tener cien años en ese momento, aunque parecían niños.
...
Después de discutir un rato, ambos se sentaron a la orilla de un lago, donde detrás de ellos, la liebre se asaba sobre un fuego que habían hecho.
"No te sientas mal; no es muy serio perder contra mí de vez en cuando", bromeó Loki al ver a su hermano refunfuñar.
"Tsk, está bien, esta vez ganas. ¿Solo dime qué quieres?" Thor aceptó de mala gana el castigo del perdedor, aunque por dentro se sentía nervioso.
