Capítulo 13: RECUERDOS. PARTE VI

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"Desde el momento en que os vi supe que, si no os mataba, os poseería. Si hubiera sido yo quien os hubiera capturado, os aseguro que habría hecho con vos exactamente lo que vos habéis hecho conmigo".

LOS BORGIA, Mario Puzo

La comida volvió a aparecer en el mismo lugar al día siguiente. Una porción al salir de la ducha y otra al medio día. Pero Hermione no la tocó.

Con el estómago revuelto por la incertidumbre y múltiples cuestionamientos dando vuelta en su cabeza, comer había dejado de ser atractivo. Tenía que admitirse a sí misma que además era un acto de rebeldía contra Malfoy y su mutismo.

El rubio había dejado la habitación esa mañana, mientras ella aún dormía, y Hermione presentía que era un modo de evitarla.

No podía dejar de preguntarse qué objeto perseguía al tenerla ahí. Sacar información de la Orden, claramente no lo era. Mantenerla lejos de una violación inminente a manos de sus secuases pudo haber explicado sus acciones al principio, pero si además se había tomado la molestia de evitarle enfrentar a solas a Bellatrix, comenzaba a pensar que Malfoy tenía otro tipo de interés en ella. No necesariamente romántico.

Bueno... en realidad, difícilmente romántico.

Tal vez todo aquello no era más que un intento de parte del rubio de tener algo que ofrecer a la Orden, en el supuesto de que quisiera cambiar de bando. De su interacción con su tía, quedaba claro que no compartía su sadismo, aunque aparentaba hacerlo. Tampoco las violaciones parecían ser lo suyo, teniendo en cuenta el suplicio que parecía haber sido para él su puesta en escena.

Aunque cierta parte de su anatomía sí reaccionó.

Hermione intentó alejar el morboso pensamiento de su cabeza. Hasta dónde sabía, existían ciertas cosas que los hombres no podían controlar, y frotarse contra un trasero desnudo ciertamente debía ser un estímulo para una parte no necesariamente comandada por el cerebro. No es que reaccionara a ella específicamente. No en verdad. Y menos a la idea de violarla. O eso esperaba.

"Debes comer, Granger...", lo oyó decir de pronto, trayéndola de regreso de sus pensamientos.

No lo había oído entrar, y recién se percataba de la oscuridad que asomaba por la ventana, dando cuenta de que había tenido un día realmente inútil.

Mientras Harry debe estar allá afuera, sin mi.

Y Ron...

Solo esperaba que Ronald estuviera junto a su amigo. Que su desaparición fuera producto de un rescate, y que estuvieran planeando ahora cómo llegar a ella.

"Granger", insistió el rubio, transparentando el cansancio en su voz. "Debes comer".

"¿Qué sentido tiene?"

Malfoy estrechó su mirada, mientras la recorría con la vista, de pie, junto a ella, que seguía hecha un ovillo entre la pared y el piso.

"¿Es esto una forma de hacer conversación para ti? ¿Te da resultado con Potter?", Hermione arrugó el ceño por reflejo ante la mención de su amigo, enfrentando su mirada. Pero Malfoy se limitó a alzar una ceja, sin lucir mayormente afectado. "Lamento decirte que no tengo tiempo para esto, así que, lo haces por las buenas, o por las malas".

"Tendrás que obligarme entonces".

En el momento en que lo vió sonreír de lado y alzar su varita hacia ella, supo que había cometido un error. Podía desafíar a Harry o Ron a que la obligaran. A personas normales, pero no a un mortífago.

MORTÍFAGO (Dramione)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora