Voy a quedarme

10 Bienvenida a mi vida

𝗡𝗼𝘁𝗮:

✨𝗗𝗶𝘀𝗳𝗿𝘂𝘁𝗲𝗻 𝗲𝘀𝘁𝗲 𝗵𝗲𝗿𝗺𝗼𝘀𝗼 𝘆 𝘁𝗿𝗶𝘀𝘁𝗲 𝗰𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼, 𝗹𝗲𝘀 𝗱𝗲𝘀𝗲𝗼 𝘂𝗻𝗮 𝗹𝗶𝗻𝗱𝗮 𝗻𝗼𝗰𝗵𝗲 𝗮 𝘁𝗼𝗱𝗼𝘀 𝘆 𝗹𝗲𝘀 𝗲𝗻𝘃𝗶𝗼 𝘂𝗻 𝗮𝗯𝗿𝗮𝘇𝗼✨♥️

Capítulo 10

Bienvenida a mi vida

Juliana ingreso al departamento de la rubia, al ingresar estaban sentadas en el sofá Camila y Maya observando a la castaña cuan fantasma hubieran visto. La pequeña se quedó observando fijamente a la castaña y cruzo sus brazos por su pecho, frunciendo el ceño al ver que su plan no resulto para espantar a la que ella creía que era novia de su Valentina.

- Hola. Dijo la castaña

- Hola Juliana, bienvenida, espero te guste la comida japonesa porque Valentina pidió eso para almorzar. En ese momento volvieron a tocar la puerta y Camila se levantó – Yo iré. Esa si debe ser la comida. Ustedes pónganse cómodas. Camila fue a la puerta dejando a las dos rubias con Juliana. La pequeña rubia no modificaba su rostro, tenía el semblante de pocos amigos.

- Me llamo Juliana. Dijo la castaña sonriendo y sacando un chocolate de su bolsillo. La pequeña bajo su mirada de miedo para ver desde los pies hasta la coronilla a Juliana.

- Me llamo Maya. Se levantó y camino por un lado de Juliana. Dejando a Juliana con la mano extendida y se fue en dirección de la cocina – Me lavare las manos mamá. Cuando la niña no se encontraba en la sala Valentina tomo el chocolate – Gracias, es un poco protectora.

- ¿Qué edad tiene? Pregunto Juliana

- Nueve. Ven siéntate, gracias por las flores. Iré a colocarlas en agua. Tranquila ella no muerde. Dijo Valentina

- No le creas es una niña de temer. Dijo Camila ingresando con la comida.

Después de almorzar, en completo silencio, las miradas de la castaña y de la rubia eran acompañadas de una sonrisa, Valentina no podía creer que Juliana estaba allí; mientras que la pequeña no dejaba de mirar a Juliana. Después de comer Camila se llevó a Maya a la habitación para ver una película, la pequeña no quería ir hasta que le convencieron, sentadas allí ambas se quedaron observándose la una a la otra y Juliana comenzó a hablar.

- Lamento, lo que paso ayer. En primer lugar fueron nuestras reglas, no me molesta que tengas una hija, solo que Val, un hijo no se oculta, es algo que le dices a la persona con la que estas saliendo, sé que no somos novias, pero me derrumbe. Me abrume, pienso que debiste decirme. Ayer no fue la manera de expresarme, esta es también Juliana una chica un poco impulsiva al hablar cuando está molesta. Juliana intentaba explicar cómo se sentía cuando de repente Valentina solo expresó.

- No es mi hija... bienvenida a mi mundo Juls. Juliana quedo impresionada. No entendía lo que estaba diciendo la rubia – Maya es mi hermana menor. Cuando yo tenía 15 años mi madre falleció dando a luz a Maya en un hospital de Argentina, mi papá estaba aquí en EEUU, mi papá se regresó a Argentina inmediatamente, el parto no estaba planificado para ese momento, pero mi mamá se puso mal. Así que estaba sola, con un bebé, cargando con la perdida de mi mamá, y a la llegada de mi papá, el quedo devastado. Estaba contando Valentina ante la mirada atenta de Juliana, quien le tomo la mano.