menudo boys one shots

sergio blass

Miré a Sergio, quién estaba caminando de un lado al otro en silencio mientras yo le hacía mimos a Angelo para que dejará de llorar pues hace unos minutos llegó a nosotros hecho llanto porque Edgardo acababa de gritarle.

A lo pocos minutos, el menor se quedo dormido de tanto llorar, trague en seco sintiéndome impotente porque el niño tambien ,estaba pasando por esto.

- ¿Le decimos a René? -pregunto él, negué

René Farrait era uno de los ex Menudos que estaba más presente entre nosotros por el simple hecho de que Edgardo le tenía un cariño especial, sin embargo, René nos cuidaba más que el propio manager.

- No podemos fastidiarlo cada que pasa esto -dije intentando levantarme silenciosamente de la cama para no molestar a Angelo.

- Quiero caerle a golpes a ese tipo para que vea lo que se siente -dijo, paso sus manos por su cabello- Primero tú, luego Ralphy... -

Camine hacía él y lo tome de los brazos.

- Con golpes no vamos a resolver nada, ¿okey? -

A regañadientes, asintió, dejé escapar una sonrisa por su actitud infantil.

- ¿Te burlas de mí? -cuestionó

"No, no" murmure divertida. Sergio rió y paso uno de mis mechones de cabello por detrás de mi oreja.

- ¿Donde vas a dormir, babe? -me pregunto mientras paseaba su mirada por mi cama debido al indefenso durmiendo en ella.

- No quiero dejarlo solo -confesé

El castaño dio pasos cortos hacía mí, se acercó para besarme, era lento y un tanto sensual, sentí mis piernas temblar en el momento en el que me tomo de la cintura para pegar más nuestro cuerpos.
Me separé sin realmente querer hacerlo.

- ¿Quieres ir a mi habitación? -pregunto

- Debemos terminar con esto -susurre cerca de su rostro- Ricky ya está sospechando y... -

- ¿Y? ¿Cuál es el problema? -dio pasos hacia atrás y luego paso por mi lado para darme la espalda- No entiendo porque te asusta tanto que los chicos se enteren -

- Si los chicos se enteran, llegará a oídos de Joselo y de Joselo a Edgardo -hice una pausa- Tu sabes que tengo prohibido hasta abrazarlos en público, ¿sabes como se va a poner Edgardo cuando se de cuenta de esto? -

Antes de Menudo, estaba en un grupo de baile y canto en Los Ángeles, mi profesora era una vieja amiga de Edgardo y el le pregunto si había algún niño con una voz suave y delicada, lamentablemente el grupo no contaba con ningún niño que cumpliera esas características y me recomendó a mi.
A mis padres nunca le han dado importancia a mi educación, somos una familia muy bien acomodada gracias a nuestras múltiples empresas por lo que no pensaron mucho en aceptar que yo fuera parte del equipo de Menudo, además, mi profesora tenía una buena relación con mis padres y al ver que Díaz era un amigo de ella, decidieron confiar, y también pensaron que no pasaría de hacer los coros, estar detrás del escenario y ese tipo de actividades.

Pero una cosa llegó a otra y todos los medios comenzaron a decir que ahora Menudo contaba con un integrante no puertorriqueño y que aparte era una chica.

Edgardo se vio obligado a salir a hablar y al darse cuenta de que no era una mala idea y que era un buen ingreso económico.

En el 83, con 11 años, me convertí en una Menudo.

Sergio entró en el 86, ambos teníamos 14 años para ese entonces, por lo que la conexión fue inmediata. Al principio estaba asustada por mis sentimientos, pero él fue tan bueno conmigo que poco a poco me fui desenvolviendo, pero solo con él.

Es un poco triste que una persona que conoces desde hace 2 años te conoce mucho más de lo que lo hacen tus padres.

Ser Menudo conlleva una gran responsabilidad, un peso bastante grande y si pudiera devolver el tiempo para elegir ser o no ser, realmente elegiría la segunda opción.

- Me da miedo dejarte aquí sola y que Edgardo venga para hacerles algo. Me quedaré -dijo mientras le ponía seguro a la puerta.

Ambos nos acostamos en las orillas, dejando a Angelo en el medio.
Mi corazón comenzó a latir rápidamente al pensar en la idea de que tal vez seríamos unos buenos padres, hace mucho no pensaba en el futuro, Sergio me hacía pensar en ello y solo espero que él siempre esté allí.