ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 12

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Aedyn nunca había hecho demasiado por su cumpleaños, no había tenido una fiesta como tal desde que cumplió ocho y no es como si él le concediera demasiada importancia al día. En la mayoría de casos, este consistía en pasar tiempo con su madre y recibir un par de regalos. Por lo que aquel año no se esperaba nada demasiado diferente. Claro, ahora estaba en Katolis, pero tenía pensado ir al campamento para esa fecha, incluso si su madre le había dicho que no hacía falta y que ella podía ir a Katolis. Pero él había insistido en ser quien viajaría, sabiendo lo ocupada que su madre había estado desde la caída de Lux Aurea. Así que suponía que harían lo mismo de siempre. Lo cual, siendo sincero, no le molestaba en absoluto. De hecho, disfrutaba mucho de su pequeña celebración.

Los guardias ya habían sido notificados que verían a un tigre infernal de dos colas acercarse hacia las últimas horas de la tarde. Y ahora solo tenía que hacer el equipaje e informar a Callum de que se marcharía pronto. Cosa que probablemente no sería demasiado difícil teniendo en cuenta todo el tiempo que pasaban juntos. Especialmente ahora que había vuelto a sentirse cómodo a su alrededor después de un par de semanas estando tenso cerca de él. No es que no estuviera agradecido por lo que el príncipe había hecho por él en los túneles, todo lo contrario. Era demasiado bueno para ser verdad. Nadie, aparte de su madre o Kin, había hecho algo así por él en años. Por lo que había pasado semanas esperando a que llegara el truco: un chantaje, una burla, una broma pesada... Cualquier cosa. Pero nada de eso había sucedido y Aedyn estaba increíblemente agradecido por ello. Aunque nunca lo admitiría, no estaba seguro de poder soportar una traición más.

También se alegraba de volver a ser capaz de relajarse alrededor del príncipe. Más que nada porque disfrutaba genuinamente de la compañía de este, incluso cuando estaban haciendo actividades más bien aburridas, como rellenar la pila de documentos que Opeli le daba a Callum cada semana. Cosa de la que precisamente se estaban encargando en ese momento.

—Gracias de nuevo por ayudarme con todo esto.

—No hay de que— Aedyn contestó, antes de volver a hablar tras unos segundos de silencio: — Por cierto, esta tarde no podré asistir a nuestras lecciones de magia. Ni a las de la semana que viene.

—¿Por qué? ¿Te encuentras bien?— El príncipe preguntó, mirándolo con curiosidad.

—Por supuesto, simplemente pienso ir a Lux Aurea para pasar mi cumpleaños con mi madre.

—Espera un segundo, ¿es tu cumpleaños?

—Lo será dentro un par de días.— Él clarificó, haciendo que Callum soltara un suspiro de alivio. —¿Pasa algo?

—No, no, es solo que me habría sabido mal hacerte pasar la mañana de tu cumpleaños haciendo papeleo...— El humano respondió y Aedyn no pudo contener un pequeño resoplido, algo divertido por lo horrorizado que parecía ante la mera idea.

—Para empezar, no me has "hecho hacer" nada, si he hecho algo ha sido porque he querido.— Aedyn se encogió de hombros. —Además, no es mi cumpleaños, así que no tienes por qué preocuparte.

—Ya, pero aún habría sido desagradable por mi parte si lo fuera. Debería haberte preguntado cuando es...

—Tampoco es tan importante.

—Aun así, lo siento.

—Disculpas aceptadas. Pero, si realmente quieres saberlo, mi cumpleaños será el diecisiete de agosto.— El elfo dijo antes de volver a enfocarse en los documentos esparcidos por el escritorio del gran mago y ponerse a trabajar de nuevo. — Ahora deberíamos centrarnos en acabar esto.

—Oh, sí, por supuesto. —Callum siguió su ejemplo, quedándose en un silencio inusual durante el resto del tiempo que pasaron en el despacho.

Continuaron trabajando hasta el mediodía, cuando ambos chicos se fueron a comer juntos antes de que Aedyn se retirara a su habitación con la intención de acabar de hacer su equipaje. Sabía que no le tomaría demasiado tiempo, pero quería asegurarse de poder empacar todo antes de marcharse. No era precisamente necesario, ya que, si todo iba bien, estaría de vuelta en una semana, dos como mucho. Pero prefería  asegurarse de estar preparado para cualquier inconveniente con el que pudiera encontrarse tanto durante el camino como en el campamento.

𝐆𝐨𝐥𝐝𝐞𝐧 𝐒𝐤𝐢𝐞𝐬 ∣ ᴄᴀʟʟᴜᴍ x ᴍᴀʟᴇ ᴏᴄDonde viven las historias. Descúbrelo ahora