[12]

530 54 17
                                    


Se adentro en el local haciendo sonar una vez más durante ese día a la pequeña campaña sobre la puerta, saludo a Torino sin embargo el silencio lo llevó a adentrarse para encontrar al mayor golpeando metal para dar forma a una nueva espada.

Este tipo de armas solían llevar bastante tiempo para elaborarse, el mismo lo ha comprobado. Lleva semanas intentando terminar de darle los detalles a su espada.

Izuku no perdió el tiempo esperando indicaciones, tomó sus guantes y comenzó a derretir más del metal para elaborar la guarda. Y mientras colocó el recipiente sobre el fuego, comenzó a darle forma a la empuñadura con trozos de madera de encino la cual una vez lista se cubriría con cuero.

Mientras trabajaba en ello, una vez estuvo listo el metal lo vertió en el contenedor y lo pasó al agua helada para después poder sacarlo con cuidado.

Obtuvo una pieza brillante y prolija al final, pero al igual que un relámpago en una fuerte tormenta llegó aquel recuerdo sobre su sueño.

El arma que tenía el cenizo con el más mínimo toque de luz resplandecía de manera cegadora.

Un leve carmín comenzó a expandirse sobre sus pecosas mejillas, la vestimenta tan detallada en su memoria lo hacía ver con un cierto atractivo. La amabilidad en sus palabras y la delicadeza que tuvo al protegerlo de aquellos barbajanes es algo a lo que sigue dándole vueltas.

Ha escuchado que los sueños siempre tienen relación con sus emociones o miedos.

"¿Acaso es porque está cerca de enamorarse?"

Imposible.

Aunque la idea cruce por su mente es rápidamente descartada y decide no ahondar más en ello. Sin embargo el miedo que sintió al ser acorralado fue real, incluso ahora en las circunstancias en cuales vive, no puede decir que es completamente libre.

Al sus padres haberlo vendido, como le aseguraron los dueños, pasó a pertenecerles y después de haberlos engañado para poder huir duda que no buscaran vengarse de él. O al menos preparar un castigo en caso de que lo encontraran.

Además Rody, Toga, Kyoka y Setsuna quienes fueron sus compañeros a los que pocas veces veía pero que les tenía aprecio por curar sus heridas esperaba que lograran huir de ese infierno. Y sobretodo que encontraran a sus familias, en especial Rody quien extrañaba a sus hermanos menores.

A veces a través de las delgadas paredes que los dividían lo escuchaba suplicando por las noches que ellos se encontrarán con bien.

Si hay algo que desea, añadido a lo que vivió. Es que ningún otro Omega sea privado y rebajado a un simple objeto.

Su libertad con la de los demás viven ahí, ¿hasta qué punto puede decir que es real?

Si de cualquier manera terminaran al lado de un Alfa, solo serían poseedores de privilegios para elegir la opción más conveniente.

Además qué sucede con aquellos Omegas que rechazan a los Alfas que tratan de cotejarlos.

¿Dejan de tomarlos en cuenta?

Teme que tal vez deba irse del lugar y si fuera así deberá exponerse a los peligros de ser atrapado.

O qué en un momento de debilidad ceda ante su instinto.

Los hermanos Toshinori podrían ayudarlo pero no está seguro de cuánto confiar en ellos, quizás solo sería cambiar de jaula con falsas promesas e ilusiones.

—Pareces algo decaído chico, ¿tanto lo extrañas?— Bromea el mayor codeando a su pensativo ayudante.

La voz de Torino le trajo de vuelta a su realidad, sacude un poco su rostro negando ante su pregunta pero también para poner en orden su semblante.

Detrás Del Velo [BakuDeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora