-"¿Eres consciente de que estoy muy enamorado de ti verdad?"-
-Bueno es normal tener al enigma comiendo de la palma de mi mano- La chica sonrió con picardía-
-"Omega traviesa pareces estar pidiendo que te castigue a gritos"-
-Hmm puede-
Unido a Ros...
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Pov's Omnisciente:
J. Vivianne se encontraba en su habitación, dedicando especial cuidado y esmero a su apariencia mientras se preparaba para salir de su hogar. Hoy, sus amigas la habían invitado a ir de compras con ellas, y ella quería lucir impecable para la ocasión.
A lo largo de su vida, Vivianne nunca había tenido amigos realmente cercanos. Siempre había sido reservada y había mantenido cierta distancia emocional con los demás debido a que su madre y ella se mudaban mucho. Sin embargo, desde que conoció a Aiura y Yumehara, todo había cambiado.
Estas dos chicas se habían vuelto muy cercanas a ella, compartiendo no solo momentos divertidos y superficiales, sino también conversaciones profundas y significativas. Vivianne había descubierto en ellas un tipo de amistad que nunca antes había experimentado, donde podía ser ella misma sin miedo al juicio y compartir sus pensamientos y sentimientos más íntimos.
Juntas, disfrutaban de hablar sobre temas comunes de chicas, como la moda y la belleza, pero también exploraban otros temas más profundos y personales. Esta conexión especial había transformado la vida de Vivianne de una manera que nunca había imaginado, llenándola de alegría y compañerismo genuino.
Con una sonrisa en el rostro, Vivianne terminó de arreglarse y se preparó para salir, emocionada por pasar otro día especial con sus amigas, disfrutando de su amistad y la complicidad que habían construido juntas.
-Mama voy a salir- Dijo Vivianne poniendo su bolso sobre su hombro- No llegaré tarde-
-Esta bien cariño- Su madre sonrió- ¿Llevas tú kit de defensa personal?-
-Siempre lo llevo- Dijo Vivianne- Chao te quiero-
-Y yo a ti-
Madre e hija se abrazaron fuertemente, Lee-Woon adoraba a su hija y le tenía mucho cariño.
Vivianne se despidió de su madre y salió de la casa, dejándola sola. Su madre suspiró, sintiendo el peso de la montaña de trabajo que tenía por delante. La mirada cansada en su rostro reflejaba su falta de motivación para enfrentarse a las tareas que le esperaban.
A pesar de tener una gran cantidad de trabajo por delante, realmente no tenía ganas de trabajar. El agotamiento mental y emocional la abrumaba, y la idea de sumergirse en la tarea parecía más una carga que una oportunidad.
-Cada vez sois más parecidos- Murmuró el-
El arrepentimiento se apoderaba de él en ocasiones, haciéndolo cuestionar su decisión de haber alejado a Vivianne de su padre. Sin embargo, el miedo a que su hijo o hija sufriera el mismo destino que él lo atormentaba día y noche, convirtiéndolo en un prisionero de sus propios temores.
Caesar, su ex pareja, era un hombre celoso y destructivo para algo era conocido como el mafioso más sanguinario y destructivo de toda Rusia. Sus comportamientos impulsivos y violentos lo habían llevado a tener episodios peligrosos, tanto consigo mismo como con los demás. El miedo a ser abandonado lo consumía, llevándolo a extremos desesperados.
