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El cenizo estaba expectante de lo que estaba pasando a su alrededor, no hace unos minutos estaba cabeceando por sueño dejando al peliverde viendo la televisión.

Pero su sorpresa fue grande cuando el pecoso lo estaba viendo con sus ojos verdes y grandes dilatados, su respiración agitada y una erección creciente en sus pantalones.

No sabía que hacer, el peliverde seguía hablándole por su apodo en señal de ayuda, no sabía que tenía o porque estaba pasando esto pero su cuerpo estaba reaccionando de una forma extraña y eso el cenizo lo puso notar.

- ¿Q-que tienes Deku? - Pregunto tratando de mantener la calma el cenizo pero no sabía que hacer en esa situación.

- D-du-ele~..... - Gimió el pecoso tratando de moverse aunque le resultó un poco difícil - K-Ka-cchan~

- Mierda Deku, estarás en.... ¿Celo? - Se pregunto a si mismo ya que no sabía si este supiera lo que es entrar en celo, aunque lo que el sabía era que solo las hembras entraban en celo y no los machos.

Era raro, no sabía cómo era la anatomía de un hombre lobo, menos la de un macho adulto.

- Vamos a la ducha, estás ardiendo - Dijo cuando puso una mano en su frente - Ven Deku, trata de ponerte de pie - Le extendió ambas manos para que el pecoso las tomará.

El pecoso solo ladeó la cabeza tratando de respirar correctamente, quería tomar las manos del cenizo pero se sentían muy pesadas trato de levantarlas pero estás temblaban, el cenizo las tomo y el peliverde gimió por el contacto de la piel del cenizo pues este tenía las manos frías.

Katsuki trato con todas sus fuerzas levantar al peliverde pero muy apenas lo alzó unos centímetros, lo intento unas dos veces más hasta poder agarrarlo por debajo de los hombros y levantarlo.

Deku temblaba tanto que hacía la tarea de Katsuki un poco difícil, más porque su erección rozaba con el abdomen del cenizo, este gemía con cada roce y se encorvaba hasta llegar al cuello del cenizo.

El cenizo paso su brazo por debajo del brazo del peliverde para que esté se apoyara su peso en el, claro que se le dificultaba caminar un poco, trataron de caminar hacia el baño de arriba con dificultad ya que el peliverde muy apenas podía mantenerse de pie.

Con mucha dificultad y tropezones pudieron llegar al baño, Katsuki llevo rápidamente al peliverde a la bañera donde le despojo de sus prendas, no batallo en quitárselas ya que el peliverde estaba laxo en la bañera y en efecto todo su cuerpo estaba ardiendo, además de que se notaban mas las pecas de su cuerpo por lo rosado que estaba.

Katsuki en es momento se atrevió a observar detenidamente el cuerpo del peliverde, este era alto y marcado, tenia muchas cicatrices pero su piel era pálida y suave, demasiado suave, tenía pecas por todo su cuerpo, desde su cara hasta hombros y piernas, su abdomen marcado y la v marcada para llegar a la pelvis, sus piernas bien contorneadas se veían fuertes.

"Diablos", pensó el cenizo al observar de esa forma el cuerpo del pecoso, pero a quien engaña, si este tenia todo lo que era un atractivo cuerpo y porte para una revista playboy, se pego mentalmente, no era momento de pensar en eso, debía de ayudar al peliverde a salir de esa desastrosa situación.

- Deku - Llamo a lo que el peliverde jadeante volteo hacia arriba para verlo - Abriré la llave, te tendrás que remojar en agua fría, veremos si con eso baja tu temperatura.

Deku solo lo vio y trato de decir algo, pero su garganta picaba un poco y sentía como sus dientes crecían un poco al ver al cenizo, cuando escucho la regadera ser abierta y tener el contacto directo del agua con su piel respingo y gimió fuerte, pues el agua fría dio directamente hacia el y su cuerpo caliente haciendo una extraña sensación en su cuerpo, sin mencionar que el agua golpeaba su erección haciendo que esta palpitara por el contacto.

MI PERRO PROTECTORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora