Damn it TordTom

30! [T2]

" ᴄᴏɴᴍɪɢᴏ"

Por la tarde del Domingo, mientras el cielo se nublaba, el detective Scott dialogaba con una señora de mayor edad, con su cabello canoso acompañado de una peineta, su saco de color magenta a juego con su ropa, era ni más ni menos que la matriarca de la familia Grace, a quien atendía, para hablar del homicidio de su nieta.

- He estado investigando a fondo, y puedo decir con seguridad que tengo al posible sospechoso en mis manos.
Hablaba de manera formal con la anciana

- Es bueno oír eso, sobre todo de usted, uno de los mejores detectives que hay en el mundo, sin duda, su trabajo es excepcional, pero sabe porque vine personalmente?

- No, no lo sé, es raro que usted se tome la molestia de venir, no solo conmigo sino a otros lugares.

- Hace poco descubrí el paradero de mi nieto, "Elvis", quien puedo decir es el mejor candidato para recibir mi herencia, sin embargo, no quiero tener problemas con lo del homicidio, ella ya está muerta y no podemos revivirla, lamento si la investigación le trajo problemas, pero quiero que suspenda el caso, ya no es de mi interés, también he retirado la denuncia, es todo.

- Pero, señora Grace, sabe lo importante que era para su hija, para sus otros nietos, para mí!

- Sé que ustedes tuvieron una historia, pero es hora de dejar el pasado atrás.

La señora se dió la vuelta, para ir de regreso a su camioneta gris, alejándose de quien pudo ser el esposo de su nieta.

- Maldita sea!
El detective golpeó la mesa desesperado.

- Scott, tranquilo, debe haber otra manera.

- Ese desgraciado me las va a pagar!

- Cómo?

- Lo vamos a desenmascarar y los arrestaremos por cualquier cosa cuestionable que haga .

- Debemos tener cuidado
Fourtour expresaba con miedo.

- Al principio, arreste a su sospechoso, aún sabiendo que el era el culpable por miedo, pero eso se acabó.

- Cuando esté en prisión, el inocente al que culpaba de traidor sera libre, no es así?

- No tenemos idea que cuánto daño ha hecho, tenemos que apurarnos.

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La noche se acercaba, Tom abotanaba su camisa negra manga larga, mientras hablaba con su reflejo.

- Tord... Dónde estás? Desde hace unos días no te veo, me preocupa que estés mal, faltan unos minutos para la fiesta por la que tanto trabajamos y aún no llegas.

- Tom? Estás listo?
Preguntó Matt, quien también vestía elegante, una camisa morada y una corbata negra.

- Solo falta la corbata

- Te ayudo.

Matt ponía una corbata azul en el cuello de su amigo.

- Matt, sabes a dónde fue Tord?

- Ni idea, pero seguro regresará pronto.

- No vendrá está noche con nosotros verdad?

- No lo sé, todo puede pasar, terminé ahora te ves igual de guapo que yo.

- Enserio?
Tom río ante el comentario.

- Si, sobretodo porque yo te regale esa corbata.

- Ajá.