Valeska Evans.
—¿Qué pasa? Ya te cambié y di de comer—miro a Asher, que sigue lloriqueando tal como lo ha hecho desde que nació.
Al principio me alarmó, creí que era anormal, pero hicieron una gran diversidad de exámenes y ninguno de ellos arrojó algo malo en mi hijo. Él simplemente llora de esa forma, callado, como si no quisiera molestar a nadie.
«Sé bien de dónde lo sacó»
»Está bien, todo está bien—lo acerco a mi pecho, acariciando su espalda mientras tarareo la primera canción que se me viene a la cabeza. «Fix You, de Coldplay»
Killian, al contrario de Asher, tiene un sueño plácido en su cuna. «Despertará en un minuto, no duermen mucho tiempo»
Mis hijos no podrían ser más opuestos. Killian es todo sonrisas, lleno de mucha energía y siempre amando recibir atención y mimos.
Asher es cerrado, no le gusta que todos lo carguen o lo toquen, es serio y muy pocas veces sonríe. Al menos cuando se trata del resto, conmigo es más... social.
No me sonríe todo el tiempo, pero cuando lo hace sus ojitos se iluminan tomando mi corazón y parte de mi alma; igual que lo hace su hermano cada vez que ríe.
—Hola, cariño—la tía Ynes entra a la habitación, ofreciéndome una cálida sonrisa que no me engaña en lo absoluto.
—¿Quién te dejó entrar?—cuestiono y su sonrisa se tambalea—. Creí haber sido clara contigo hace unos meses cuando viniste. No te quiero cerca de mi o de mis hijos.
—Tengo mis trucos—contesta a la primera pregunta, acercándose con una sonrisa desdeñosa que me hace apretar a Asher contra mi pecho.
Mi bebé está callado, como si supiera que este momento no es bueno para llorar. Como si no quisiera agregarme más tensión de lo que lo hace la presencia de mi tía.
»Ya no hay dinero, cariño—dice y respiro profundo, sintiendo que mi corazón comienza a latir rápidamente—. Todo en la vida tiene un precio, ¿sabes?. Tú me saliste cara. Me debes.
Esta mujer me crió desde que mis padres murieron cuando tenía quince en un accidente de avión. Es la hermana de papá, y hasta que no la conocí no supe porqué él nunca quiso que ella se acercara a nosotros.
—No tengo dinero—miento, sin un solo temblor en mi voz.
Desde que comencé a pelear en el Mortal Cage ella comenzó a pedir dinero. Cada vez más y más, exigiéndome pagar la deuda por cada cosa que me dió cuando yo era una niña.
Al principio creí que ella tenía razón, luego comencé a fastidiarme y luego... comenzaron las amenazas. Las mismas que me llevaron al infierno por su maldita ambición.
—Ambas sabemos que eso no es cierto—ríe escandalosamente, logrando que Killian comience a llorar—. Ugh, malditos mocosos—se frota las sienes y mi pecho se llena de molestia ante la forma en la que llama a mis hijos—. Dame mi dinero y me iré.
«Solo esta vez, Leska» me digo. «Te vas mañana, ella no llega hasta Londres»
Respiro profundo, dándome la vuelta para dejar a Asher junto a Kill, sintiendo mi corazón romperse cuando su llanto aumenta, exigiéndome que lo tome en mis brazos y lo calme.
Con lágrimas en los ojos, me doy la vuelta y tomo con fuerza el brazo de mi tía, que intenta zafarse pero no se lo permito. «Hasta hoy. Esto se acaba hoy, joder»
Camino a la sala y tomo mi cartera, sacando el fajo de dinero que saqué de mi cuenta de banco y se lo lanzo al pecho con fuerza antes de rodear su cuello con mi mano, apretando con la fuerza suficiente para que sus ojos brillen de miedo, recordando que lo que ella me hizo ser es lo mismo que podría matarla ahora mismo.
Si no hubiera cambiado. «Pero por mis hijos podría asesinarla aquí mismo, al final del día si mancho de sangre estas paredes no importa porque mañana no estaremos aquí»
—Si vuelves a joderme una vez más, solo una—sonrío y ella tiembla—. Voy a cortarte el cuello como a mis contrincantes del Mortal Cage. Nadie puede impedirlo, nadie te vengará—le recuerdo—. Así que no busques lo que no quieres encontrar, tía.
»Y si vuelves a insultar a mis hijos, voy a arrancarte la lengua y hacerte beber ácido hasta que tu garganta no sea más que carne agujereada—amenazo, arrastrándola hasta la puerta del departamento y arrojándola fuera—. Buenas noches.
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Blood of The Gods [Christopher Morgan]
FanfictionDos peleadores a muerte. Dos noches juntos. La creencia de una traición me llevó a huir, pero solo 17 meses después vuelvo a encontrarme de frente con Legion o, como había descubierto recientemente, Christopher Morgan. Nuestra sangre fue derramada e...