Christopher.
—¿Y esto?—Valeska frunce el ceño a la bolsa con dos envases de helado.
—Son para Rosie. —Las quito del asiento y las dejo en la parte trasera del Bugatti—. Y ahí está tu botella de vino también.
—Gracias. —Sonríe, bajando el espejo mientras saca su cosmetiquera—. Dios, los niños están imperativos hoy. Pasé todo el día corriendo tras ellos luego de terminar la reunión.
—¿La reunión con quien?—Frunzo el ceño y ella me mira brevemente mientras se pone rubor con una brocha.
Ella no suele maquillarse. Es extraño que lo haga. La he visto, y no usa más que rubor y labial solo en ocasiones "necesarias", así que me sorprende verla hacerlo.
Pongo atención a sus movimientos mientras manejo, entrecerrando los ojos ante el nerviosismo reflejado en sus manos inquietas. «¿Busca qué hacer porque estamos en el mismo auto?»
—Rosalie quiere invertir en una compañía de productos para bebés. Es nueva, se llama Stavis y sus productos me han salvado la vida. —Ríe—. ¿Alguna vez te dije que Killian rechazó cada jodido biberón que compré para él? Eran noches llorando y yo estresada porque no sabía que hacer. El biberón Stavis me salvó la vida, y sus productos son todos amables con el medio ambiente.
—Mhm, los asientos de los niños son de esa marca. —Asiento, recordando a Simón insistiendo en que tenían que ser exactamente esos por su calidad y porque son los más seguros.
—Oh, si. —Ella saca el labial y yo reduzco la velocidad—. ¿Te dije que Marissa y Adrianne pospusieron la boda una semana más?
—¿Si?—pregunto, aunque lo que menos me importa es la boda de su amiga y la hermana de Simón.
—Si. Adrianne cambió de opinión sobre el lugar, así que van a tomar un poco de tiempo para ir a visitar el lugar planeado luego del parto de Rosie.
—Mhm.
—Oh, y Patrick y Alexa llevarán a Matteo. La niñera les canceló.
Asiento, recordando al bebé de casi tres meses de Patrick y Alexa al que bautizaron hace poco. Rosalie y yo somos los padrinos.
—¿Por qué estás nerviosa?—Le ahorro tener que buscar otro tema de conversación y ella levanta las cejas, guardando de nuevo su labial antes de mirarme.
—Es que quiero hablar contigo. —Suspira, cerrando de nuevo el espejo antes de centrar su atención en mi—. Pero no sé como decírtelo sin que lo tomes de otra forma.
—Simplemente dilo. —Me encojo de hombros.
Ella respira profundo, volviendo a meter su cosmetiquera en su cartera, tomándose los segundos necesarios para lo que creo es pensar en las palabras adecuadas.
—Escuché que Rachel James está de vuelta de su misión—murmura y asiento—. Conozco la complicación que hubo entre ella, Gema y tú antes de que yo llegara; conozco tu historia con ella. —Suspira—. Pero es amiga de Luisa.
—¿Y?
—Que no quiero interferir en tu relación con Rachel James, es tu vida y puedes hacer lo que desees. —Se gira lo que puede para verme—. Pero tenemos hijos. Dos. Y su tía ha sido constantemente atacada por Luisa Banner y sus amigas. Así que no quiero que esa mujer, o ninguna de las amigas de Luisa, esté cerca de nuestros hijos. No me parece correcto y no quiero a esa clase de gente rodeando a los niños.
Golpeo el volante con mis dedos, callando mientras proceso lo que ella acaba de decirme.
Tiene lógica, no puedo negarle eso. Rosalie no sufre por lo que hace Luisa, ha aprendido a simplemente rodar los ojos y mandarla a la mierda, pero Luisa y sus amigas parecen tener de comidilla a mi hermana desde que llegó.
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Blood of The Gods [Christopher Morgan]
FanfictionDos peleadores a muerte. Dos noches juntos. La creencia de una traición me llevó a huir, pero solo 17 meses después vuelvo a encontrarme de frente con Legion o, como había descubierto recientemente, Christopher Morgan. Nuestra sangre fue derramada e...