El músico de la línea catorce - Tonway

Un gran paso

Despertó con el sonido de su móvil resonando en la habitación, rompiendo la tranquilidad de la mañana. Con pesadez, se removió entre las sábanas, incómodo y con pereza, buscando una posición que lo aleje del sol que se filtra a través de las cortinas y le da directamente en los ojos. El resplandor le obliga a parpadear varias veces, tratando de acostumbrarse a la luz del día.
Luchando contra el cansancio se sienta a la orilla de la cama alcanzando su teléfono que aún carga sobre la comoda justo a su lado. Un largo bostezo escapa de sus labios mientras se estira escuchando el crujir de varios huesos, los brazos en alto, los dedos entrelazados, un gesto simple que lo hace sentirse más despierto antes de desbloquear el móvil y revisar las notificaciones que se acumulan en la pantalla.

WhatsApp • 13 mensajes de 3 chats

Volkov ¿Van a ir todos a las seis?
Volkov Imagino que cada uno paga lo s..
Volkov +3 mensajes.
Gusnabo Me vas a pagar treinta copas viejo.
Gusnabo No te creas.
Gusnabo + 2 mensajes.
Gilipollas envió una foto.
Gilipollas :(
Gilipollas +2 mensajes nuevos.

—Joder, no sabía yo que estaba tan cotizado —Murmuró levantándose lentamente de la cama en dirección al baño con la mirada aún perdida en la pantalla.

Volkov

9:37

¿Van a ir todos a las seis?

Me imagino que cada uno paga lo suyo.

¿Va a ir Freddy al final?

No me ha dicho nada.

≽^•⩊•^≼

12:38

Otaku tenías que ser.

Freddy no sabe si va, igual llega reventado del viaje.

Y Gordon invita, tu no te preocupes.

¿Te acabas de despertar?

Eso no te incumbe.

(ง •̀ᗝ•́)ง

Odio esas putas caritas de mierda.

(◞‸◟)

Te odio a ti.

¿Más que al músico?

Están al mismo nivel.

Yo también te quiero.

^ᴗ^♡

¿Cómo siquiera haces esas caritas?

Con mucha habilidad.

¿Copia y pega?

Sí.

Conway, con una risa apenas audible, coloca su móvil sobre el lavamanos. Su reflejo en el espejo muestra un rostro cansado, marcado por una rutina del sueño deplorable. El agua fresca le despierta mientras se enjuaga la cara y cepilla sus dientes. La toalla suave acaricia su piel al secarse antes de partir en búsqueda de una mas grande y un cambio de ropa limpia para sumergirse en la ducha, donde el agua caliente relaja sus músculos por un instante. Al salir, dejando varios charcos de agua, el móvil vuelve a sus manos, y su mirada se pierde en la pantalla y el resto de los chats que quedaron pendientes. Mientras se coloca con dificultad los pantalones su mirada viaja entre los mensajes restantes.