Episodio 21: Mente aturdida, corazón desecho.

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Pov: Nagi.

Quedé perplejo en ese odioso salón de clases, salí de ahí y me fui hacia la terraza, de todas formas ya no podía entrar a historia, no importa pediré unos apuntes y listo. Sentado en mí lugar habitual recapitule todo lo que acaba de pasar, y ¿Saben que? No tengo el tiempo ni las ganas de darle mas vueltas al asunto, Reo y Akane están juntos ahora y punto, no hay mucho más que decir, además de eso Reo solo me culpó por lo sucedido y no hay nada más cobarde que eso, por el amor de dios ¿Acaso piensa que yo quería que pase toda esta mierda? Literalmente mí mundo está tan jodido como de él, sé que no se deben comparar nuestras situaciones, no pude hablar bien con él solo sé que su madre no está y no soy un imbecil, trato de tener empatía con él pero también necesito que sea mutuo. En fin, si el no quiere que me acerque pues no lo aré, tengo suficientes problemas como para que Reo sea algo más en mí lista. En unos días será la mudanza, debo volver a la casa donde pase la peor noche de mí vida, también tengo el primer juego del nacional, y luego debo ponerme al día con las clases que perdí en este tiempo incluyendo la de ahora, ya que me advirtieron que si mí promedio baja no podré jugar, sin olvidar que el juicio no tardará en empezar y debo hacer muchas declaraciones y presentarme en la corte. Muy bien Seishiro, una cosa a la vez. Al menos tendre la cabeza suficientemente ocupada, aunque sea un fastidio por el momento debo concentrarme en estas cosas, lo demás puede esperar.

Bajé de la terraza y me apresuré en llegar a mí próxima clase, la cual para mí suerte pasó más rápido de lo que pensaba y mí día terminó relativamente bien, aún debía buscar al entrenador para hablar con él, pregunté en secretaría y le dijeron que estaba en la sala de profesores, así que simplemente caminé hasta allí, toqué la puerta y me recibió.

- Entrenador... Quería hablar con usted sobre...

- No te preocupes Nagi, tú madre habló con el director y el se encargó de avisarnos. ¿Cómo te encuentras? ¿Crees que puedes jugar o quieres darte un tiempo?.

- Estoy bien, si fuera por mí jugaría ahora mismo.

- Es genial lo que dices, me alegra saber que sigues en pie. Desde que Reo se fue y tú estabas en el hospital los chicos estaban preocupados.

- Si, Zantetzu me dijo lo de Reo.

- La verdad es que me tomó por sorpresa, y sin dudas fue un golpe duro para sus compañeros. Es una tristeza, después de todo era un gran jugador además de el haber formando el club.

¿Que dijo, "formar el club"?

- ¿Formar el club, de que está hablando?¿No se supone que cada escuela tiene sus clubs deportivos?

- Algo así Nagi, esta escuela es de mucho prestigio, los clubes deportivos no eran lo que más resaltaba precisamente, es más yo trabajo aquí desde que Reo formó el equipo, ya que necesitaban un entrenador de fútbol. Reo junto a los chicos e hizo peticiones a la escuela, junto firmas, incluso el diseñó el uniforme, este equipo era completamente suyo... Zantetzu lo ayudaba casi en todo, el fue el primer miembro de equipo y luego fueron llegando más, por así decirlo Reo ganó por cansancio y me contrataron ya que un pequeño de 16 años no podía liderar todo, cuando entré a trabajar los chicos solo le obedecían a él, es un líder con todas las letras.

- Eso no lo sabía.

- Jajaja a pesar de todo ¿Reo no es tan presumido no?.

- Al parecer no.

- Es por eso que en la última práctica les pregunté si alguno de ellos quería ser el capitán, en realidad pensé en Zantetzu primero ya que él fue el primero en unirse a Reo, pero sin dudas lo rechazo, ninguno de ellos quiere ocupar ese lugar y sin dudas lo respeto, la lealtad y el aprecio por quién se impuso ante una jerarquía como la de esta escuela, pocos tienen ese valor como lo tuvo Reo.

- Supongo que... No me sorprende que Reo consiga lo que quiera, el es... Bastante caprichoso, siempre se sale con la suya.

- Jajaja, tal vez tengas razón en eso Nagi, quien sabe porque Reo lo hizo en un primer lugar, pero hay una gran diferencia entre un capricho y la perseverancia para conseguirlo. Tal vez es la imagen que tienes de él, ya que sí, es un chico popular y millonario... Pero no deberías quedarte con una sola perspectiva.

- ¿Ahora no es el entrenador sino un acompañante terapéutico?.

- Para nada. Te veo en la práctica del viernes, en dos semanas tendremos el primer partido del nacional.

- Si, claro, nos vemos.

Me di la vuelta para dirigirme a la salida, sin dudas la idea de que Reo formó por si solo el equipo de fútbol es algo que no see había ocurrido, es impresionante por muy molesto que sea admitirlo, mientras caminaba puse mí vista al frente y en la entrada allí estaba uno de mis problemas con ojos violeta, sonriendo con Akane mientras se subían a la limusina de él, me quedé parado ya que no tenía ganas de estar cerca de ellos después de lo que pasó, cuando ambos se subieron y el vehículo arrancó, salí de la escuela y me dispuse a caminar hasta llegar al hotel.

Al llegar, mí madre estaba hablando por teléfono mientras acomodaba algunas de nuestras pocas pertenecías. Me dispuse a hacer yo mismo la cena para que ella descanse, y podamos comer tranquilos. No hice la gran cosa, un poco de arroz y Katsudon.

- Te quedó delicioso Seishiro.

- Gracias.

- El abogado llamó, dijeron que él quiere que lo vayamos a ver en la comisaría... Para un arreglo, supongo que por estrategia de su abogado.

- ¿Es una broma?.

- Seishiro...

- No iremos. Desición final.

- No tenía pensando ir, ni mucho menos llevarte, solo... Hay que hacernos una idea de que lo veremos pronto, el juicio llegará tarde o temprano.

- Hasta que ese momento llegue mamá, no ahora, por favor cenemos en paz.

- Está bien cariño... ¿Cómo te fue en la escuela?.

- Bien, hablé con el entrenador y el viernes iré al entrenamiento, en dos semanas tengo un partido importante por el nacional.

- Me alegro mucho Sei... Y... ¿Reo...

- Él está bien.

- Ah me alegro mucho saber eso... Tal vez si algún día salen temprano de sus clases Él pueda...

- No madre, él está bien y solo eso, no lo volveremos a ver.

- ¿Pero...?

- Madre, Reo y yo tomaremos camino diferentes, no quiero volver a hablar del tema ¿Está bien?.

- Si, Seishiro, lo siento.

- No es nada personal mamá, gracias por preocuparte, pero tenemos mayores problemas ahora. Hay muchas cosas en las que debemos pensar, incluso más importantes.

- Si cariño, pero yo solo quiero que estés tranquilo.

- Lo estoy, se lo que debo hacer y eso me da tranquilidad.

- Te adoro Seishiro, no sé que haría de mí vida sin ti, eres lo más importante para mí, soy tu madre y siempre voy a ver por tu felicidad.

- Lo sé mamá, yo también te quiero.

Terminamos de cenar y por suerte llegó el momento para ir a dormir, no haré que estos sentimientos me quiten el sueño. A partir de mañana tomaré completamente las riendas de mí vida, no le permitiré ser débil, mucho menos ahora.

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