Section 205

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-Wow- podía sentir mis ojos iluminándose cuando me quedé parada. Estaba en el escenario del Madison Square Garden viendo a los miles y miles de asientos vacíos enfrente de mí. Era cómo una niña en una tienda de dulces... sin los dulces... y no soy una niña, ¿saben qué? Olviden esa analogía, reprobé esa parte del examen de todas formas. –Estoy nerviosa sólo de estar parada aquí, no sé cómo lo hacen con todos los asientos llenos.- él se rió.

-Entonces, ¿te gusta? ¿Estoy cumpliendo alguno de tus sueños de la infancia en este momento?- estás cumpliendo mis fantasías adultas.

-De hecho, sí. Cuando era pequeña quería ser famosa por cantar.- dije sonriendo y él se rio asintiendo con la cabeza esperando a que continuara. –No te rías, era real. Incluso inventé mi mundo imaginario de qué pasaría si fuera famosa, era increíble. Me tomó unos 3 años de mi vida.

-Eso es lindo.- dijo molestándome -¿Qué tan joven eras?

-...segundo de secundaria.- dije con pena.

-Así que hace unos 4 años. Eso no es nada joven.

-Más bien 5 pero aun así... Lo razoné y me di cuenta de que si ponía un gato en una trituradora sonaría mucho mejor que yo tratando de cantar.

-Estoy seguro de que eso no es cierto.- se bajó del escenario y sentó en uno de los asientos de la primera fila agitando su cabello para acomodarlo. –Adelante, pretende que estás en The X Factor y que soy el tío Simey.- se ajustó la playera y comenzó a sobarse los pezones. Yo no pude evitar reír. -¿Qué va a cantar para nosotros, bueno... para mí, hoy?

-Una canción que me llega al corazón. Me acompañó en los malos tiempos, e hizo que siguiera el camino hacia el bien.- el asintió con la cabeza, esperando. -Estrellita dónde estas, quiero verte sin tilar, en el cielo sobre el mar, un diamante de verdad. Estrellita dónde estas, quiero verte... sin... tilaaaaar. Gracias.- ambos nos reímos y se me quedo viendo por un segundo.

-Bueno, eres bastante entretenida, ¿no?- era la segunda vez que lo decía hoy. Había un soporte de micrófono ahí mismo... usarlo como un tubo de stripper o no, esa es la pregunta.

-Me pregunto cómo es sentarte hasta allá arriba.- dije señalando las filas de hasta al fondo.

-¿Lo averiguamos?- su voz sonó muy profunda. Si hace eso de nuevo cuando estemos allá, lo más probable es que me lance.

Íbamos caminando por los pasillos hablando de cosas raras cuando gritó, -¡Corre!- y empezó a correr. Dios mío. Obviamente yo estaba forzada a correr también.

-¡Harry! ¡Esto no es justo! ¡No sabes lo difícil que es correr con dos bolsas de arena atadas a tu pecho tratando de noquearte!- escuché el eco de su risa. Llegué a las escaleras y busqué el botón de encender pero estaba apagado por la noche. Subí lo más rápido que pude. Esto va a ser tan vergonzoso cuando no pueda recuperar el aliento. Me detuve al fondo y me recargué en la pared. Dios.

-¿Qué pasa? ¿Eres un poco lenta?

-Siempre me elegían al último en clase de deportes, claro que soy lenta.- el me indicó con la cabeza que lo siguiera y atravesamos las puertas para ver todo el Madison Square Garden desde arriba. Estaba lejos del escenario pero pintoresco. –Sección 205, buena elección, Honestamente es realmente loco que la gente pague dinero para sentarse aquí cuando no puedes ver nada del escenario.- dijo.

-Bueno, algunas personas vienen y gastan mucho dinero solo para saber que están en el mismo edificio que ustedes, respirando el mismo aire. Sólo escuchar las voces y canciones familiares, que en algunos casos han cambiado la vida de las personas, hacen su noche y todo el dinero gastado vale la pena.- respondí todavía mirando al escenario y luego a él.

New York (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora