Room 544

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-¡Despierta! ¡Son las 5 de la tarde!- alguien estaba brincando en mi cama. Y aplaudiendo. Odio que la gente aplauda para despertarme.

-No me importa.- murmuré y enterré mi cara en la cama.

-Te tiene que importar. Nos tenemos que ir ahora. A menos de que no quieras ver el show esta noche.- escuché la voz de Niall en el otro lado del cuarto. Liam estaba brincando en mi cama.

-Está bien.- dije sentándome. Quité la baba de mi cara y sobé mis ojos viendo alrededor como un cachorro perdido. -¿Dónde estoy?- había manejado tanto los últimos días que no tenía idea de qué estaba pasando.

-Bueno, estás al norte de Nueva York en un hotel y parece que tienes resaca.- dijo Niall. Después de llegar al estadio en Maryland dormí por tanto tiempo en el sillón de los vestidores que me perdí la mitad del concierto. Y algo me poseyó para que manejara otras 4 horas después de eso a Nueva York a donde llegamos a las 5 de la mañana. Había estado tirada en mi cuarto de hotel por 12 horas.

-Estoy cansada.- dijo y me paré tambaleándome hacia el baño.

-Lo sé, deberías estarlo. Con toda la prensa y ensayos que has estado haciendo todo el día. Es comprensible.- dijo Liam sarcásticamente. Le hice una señal no muy amable con la mano.

-Eww, ¡hay una araña!- grité con voz masculina. La maté inmediatamente con mi pantufla y tiré su cuerpo sin vida en el escusado. Tan pronto como le jalé, el agua empezó a brotar y se salió del escusado. -¡RETIRADA! ¡RETIRADA!- salí corriendo del baño con mis pies llenos de agua. –Marky Mark, ¡no!- agarré mi peluche del suelo y brinqué dramáticamente en mi cama. Niall y Liam no paraban de reírse. Pronto, la mitad del cuarto estaba lleno de agua.

-¿A qué te refieres con que no tienes otro cuarto disponible?- pregunté en el mostrador con mis maletas y Marky Mark en mis manos. Harry, Niall y Paul estaban conmigo.

-Realmente no tengo otro cuarto en el que te puedas quedar, todo está lleno.-

-Ugh,- gruñí, -supongo que dormiré con el agua del escusado. Esto es lo que recibo por tratar de tirar a una araña inocente.

-Bueno, ¿por qué no te quedas conmigo? Es sólo una noche y mi cuarto es suficientemente grande.- dijo Harry. Niall y yo lo miramos con la misma expresión en la cara. –Oh vamos, no vamos a compartir cama.- Tristemente.

-Está bien. Supongo que eres mejor que el escusado.- dije tomando mis cosas y caminando hacia su cuarto.

-¡Gracias!- me respondió sarcásticamente. Yo solo lo miré sobre mi hombro y le sonreí. Cuando llegamos al cuarto 544 Harry abrió la puerta y yo entré. Era muy lindo. Tenía un sillón muy grande y había una pequeña mesa detrás de él. Incluso había una pequeña cocineta y a través de las dos puertas francesas había una cama tamaño queen, otro sillón y el baño. Caminé hacia el sillón en la sala y me senté, tirando mis cosas a un lado.

-Esto es cómodo.- dijo rebotando como una niña de 4 años.

-¿A qué te refieres con "esto es cómodo"?- dijo acercándose.

-¿Me refiero a que es cómodo?

-No, quiero decir, tu duermes en la cama... yo duermo aquí.- dijo sintiendo el colchón.

-No, no, no.- respondí. El giró los ojos. –Escucha, es en serio. Tú necesitas dormir bien. Yo no. Tú tienes personas que... entretener. Yo no. Yo puedo parecer muerta en la mañana...

-Está bien, lo entiendo, pero aun así. No es correcto.

-Tú no estás en lo correcto.- le respondí y crucé los brazos.

New York (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora