Me desperté la mañana siguiente y me senté creyendo que todo lo sucedido ayer era un sueño. Tomé mi teléfono para ver la hora y todavía estaba en la página en la que lo había dejado la noche anterior. Mi twitter tenía al menos 12,000 seguidores más. Y muchas notificaciones de interacciones. Ni siquiera quería mirarlas... ¿qué tal si eran crueles? Quiero decir, no tengo emociones ¡pero aun así! Mi abuela diciéndome que parecía hombre era suficiente. No necesito miles de adolescentes enojadas a las que ni siquiera les ha llegado el periodo diciéndomelo también. Entré en mis contactos y vi 5 nuevos nombres en mi agenda.
-Voy a vomitar.- dije silenciosamente. Entré al cuarto de Jamie y la miré por un segundo. –Voy a vomitar.- dije segura y asintiendo con la cabeza aceptándolo.
-Bueno, entonces saca tu trasero de mi cuarto.
-Ya está, estoy segura. Me voy a enfermar.- hubo un segundo de silencio en el que solo nos miramos. Una buena amiga me haría sentarme y me daría una bolsa. Pero ella...
-Enserio, vete. No necesito más fluidos en mi piso.- yo asentí, fui a la cocina y me serví un plato de cereal. Me senté en el sillón y me lo comí... creo que no voy a vomitar. Jamie entró en el cuarto y dijo casualmente, -Entonces, ¿cuándo vas a dejar que los conozca para poder coger con Zayn Malik?- escupí lo que estaba comiendo. -¿Muy pronto?- sólo la miré y asentí.
-Bueno, considerando que no quiero que no me vuelvan a hablar nunca, yo creo que no los vas a conocer pronto.- miré el reloj, eran las 12:30 de la tarde. Tal vez podría volver a la cama hasta que llamen. Me tiré en el sillón y cerré mis ojos por lo que pareció un segundo. Me desperté con el fuerte sonido del timbre de mi celular. Me caí del sillón elegantemente. Al menos no me pegué en mi dedo del pie esta ve-
-¡Mierda!- grité al tiempo que me pegaba con la mesa cuando me paraba. Miré mi celular y mi cara fue de "Odio al mundo y a todos" a sonreír como una psicópata cuando olvida tomar sus medicinas.
Hola, solo quería que supieras que ya terminamos con todas las cosas de la prensa. Lamento que tomara más tiempo. Liam te va a enviar la dirección. Realmente espero que puedas venir.
Ese mensaje era de Harry pero me llegó otro un minuto después con la dirección y la hora. Era un hotel del que nunca había escuchado... un hotel. Interesante lugar para encontrarnos. Deja de pensar así. Deja de imaginártelo desnudo. ¡Basta! No, a Liam tampoco, él tiene novia y es demasiado inocente para que tu mente lo profane.
Llegué a la entrada del hotel y había unas 200 personas esperando afuera. ¿A mí? No se hubieran molestado. Sentí sus miradas en mí cuando caminé por las puertas. El hombre al frente que lucía como el monstruo de las galletas me pidió mi llave. Le dije que no tenía una pero que estaba visitando el cuarto 413. Tuvo que hacer una llamada y luego me dejó entrar.
Llegué al cuarto y mi corazón empezó a latir muy rápido no sé por qué. Toqué la puerta y abrió Liam. Sonreí como retrasada.
-¿Cuál es la contraseña?- preguntó.
-Bueno, puedo imaginar que es una palabra sucia y no quiero avergonzarme diciendo todas las que conozco así que...- sonrió y me dejó pasar. –Hola.- dije y me acerqué a darles un abrazo. Usualmente no me gusta tocar a la gente o abrazarla pero iba a hacer una excepción.
-Tu cara esta roja, ¿estás bien?- preguntó Liam.
-Sí, hace calor afuera.- respondí sin pensar.
-Es diciembre...- añadió Niall. Terminé la conversación y me senté. Empezando a hablar cuando Niall estaba leyendo su tuits, ¿Cuál es el talento más raro que tienes?- supongo que una fan le estaba preguntando. –No lo sé, ¿cuál es el talento más raro que tú tienes?- me dijo.
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New York (Español)
RomanceZana es una chica normal que estudia y vive en Nueva York. Hace cosas normales como ir de compras, comer más de lo que debería y arrepentirse luego, dormir, y por supuesto ser amiga de la boy band más exitosa del mundo, pero eso es un punto y aparte...