Retaliation

Maratón 2/3

Narra Samantha
Enseguida llega la policía y pasan a tomarnos declaración.
-A ver, cuéntenos, que hizo la señorita Renee Young? -Me interroga un policía.
-Me secuestró, me golpeó y me maltrató física y psicológicamente.
-Tiene usted pruebas de todo lo que afirma? -Me pregunta el hombre.
-Si, tenemos un testigo que estaría dispuesto a ir a juicio y un video en el que se ve claramente todo el maltrato al que he estado expuesta. -Digo firmemente.
-Podría verlo? -pregunta con curiosidad.
-Claro. -Cojo el móbil de Jon y se lo enseño al agente, el cual emseguida pone una cara rara.
-Puede estar usted tranquila, haremos todo lo posible por atrapar a esa criminal.
Dicho esto, el hombre se va.
Voy al cuarto de mi hija y me quedo un rato con ella, me siento en la mecedora con ella en mis brazos. No puedo evitar apreciar lo hermosa que es, y np lo digo solo porque es mi hija, es que es el bebé más bonito que he visto en mi vida.
Estoy pensando en mis cosas cuando llega Jonathan.
-Hola.
-Hola -le respondo -lo siento mucho, Jon, en serio, lo siento.
-No, no, no, no tienes nada por lo que disculparte, todos cometemos errores y en este caso fue mio, no debí haberme puesto tan pesado con aquello, y mucho menos haber salido con esa loca, en serio, lo siento mucho.
Jon está... llorando? No me lo puedo creer. Enseguida lo abrazo.
-No es culpa de nadie, tu no podías saber lo que iba a pasar.
-Pero pude haber sido más comprensivo contigo...
-Ahora las cosas están echas, además, una vez leí que no debes lamentarte por lo pasado si no prepararte para el futuro, que nunca sabes que va a pasar.
Aún no he acabadp de hablar cuando Jon me calla con un beso, ciertamente, la mejor forma de callar a alguien.
Juntos dejamos a nuestra hija en la cuna y nos vamos a nuestra habitación.
Jonathan me besa apasionadamente y me acuesta delicadamente en nuestra cama. Le doy pequeños lamentones en el cuello y el gruñe de puro placer.
Nos quitamos la ropa lentamente, disfrutando del cuerpo del otro, besando cada zona de piel que queda descubierta hasta que por fin, nos unimos en uno solo. Experimentamos el placer supremo en el momento en que nos unimos en uno solo. Realmente hacerlo con alguien a quien amas de verdad es inexplicable y hermoso. Un acto de amor.
Terminamos agotados. El se queda encima de mi, con su cabeza acomodada en mis pechos cual niño pequeño.
Dos meses después
No hemos vuelto a hablar de la boda y en mi fuero interno temo que se haya arrepentido, pero no voy a decirle nada, no quiero presionarlo.
En el momento en que estoy con esas cavilaciones tocan a la puerta, es una carta para mi, la abro y me quedo de piedra, es de Renee. Dice lo siguiente: Sé que me has denunciado, pero eso es igual, la policía no podrá encontrarme nunca y tu tampoco vas a ser feliz. Aprovecha, te queda poco tiempo.
Termino de leer y me apollo en una pared, por la que voy escurriéndome lentamente. Cuando regresa Jonathan me encuentra llorando y mirando a la nada mientras abrazo mis rodillas. No me quiero morir.
-Qué te ocurre? -Me pregunta todo preocupado. Le señalo la carta y me abraza al instante. -Escuchame bien Samantha, no te va a pasar nada. Hoy mismo salimos del país, regresamos a EE.UU.
-Vale -digo yo sin fuerzas.
-Y nos casaremos el 15 de julio.
-Espera, que? -pregunto impresionada, ha dicho nos casaremos?
-Si a ti te parece bien, claro. -Dice mirándome tímidamente.
-Jonathan Good, te amo.

TO BE CONTINUED
P.D. Vestios elegantes, chicas, que... Nos vamos de bodorrio!!!