Retaliation

Capítulo 8

Ok, antes de nada, avisar de que va a haber lenguaje sexual explícito y que estoy tan inspirada que no pude evitar ponerme a escribir a las cuatro de la madrugada cuando dije que lo oba a hacer mañana, bueno, tecnicamente es mañana.
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Dean me llevó a mi casa y me metió dentro a la fuerza. Ya iba a protestar cuando me pone contra la pared y me besa ferozmente. Nuestras lenguas se unen en una cruenta batalla por el dominio.
Me muerde el labio inferior y tira ligeramente de él. No puedo evitar dejar escapar un fuerte gemido.
Cuando nos separamos me lanzo a su cuello para morderlo. Le hago un chupón y me paro un momento para apreciar mi obra maestra. Así no se le acercará ninguna zorra polioperada. El es mío.
Intenta bajarme la cremallera del vestido, pero sin éxito, se ha atascado. Como él no es que tenga mucha paciencia, enseguida acaba roto en el suelo y mi sujetador corre pronto la misma suerte.
Ahora quiero llevar yo las riendas así que lo agarro del pelo y tiro fuertemente. Le doy un mordisco en el cuello y, cuando quiere darse cuenta ya solo tiene puestos los pantalones.
Como enloquecido por mi mordisco me empuja contra la mesa de centro que tengo, con tan mala suerte que tiramos un jarrón, en ese momento no me preocupa en lo más mínimo, pero más tarde lo regañaré.
Dean me da besos por todo el vientre y me baja las bragas con los dientes.
-DEAN! OH SI! -grito. Si los vecinos no lo han escuchado es que están sordos.
Enseguida sumerge mi cara en mi feminidad. Dos de sus dedos están ocupados moviéndose en mi interior mientras que, con la boca se ocupa de mi clítoris.
Entre gritos llego al orgasmo, y es tan potente que creo ver unas lucecitas de colores a ambos lados de su cara.
Cuando me recupero lo veo relamiendose sus labios.
Decido pagarle con la misma moneda, así que enseguida libero su erección y empiezo a lamerla y chuparla. Él gime mi nombre y eso me encanta.
Jon me agarra del pelo y forzandome a seguir su ritmo acaba en un orgasmo gritando mi nombre a los cuatro vientos.
Parece que aún no hemos tenido lo suficiente el uno del otro porque enseguida nos lanzamos a continuar con lo que hemos empezado.
Me pone contra la pared. Mis piernas rodean su cintura y de un solo golpe me penetra fuertemente.
No puedo evitar gritar.
-Así aprenderás que eres mía, y todos los estúpidos que se atrevan a acercarse a ti recibirán una paliza.
-Yo solo me pertenezco a mi misma.-dije eso, pero la verdad es que me siento como algo suyo en este momento.
-Pues entonces quizá tenga que enseñarte una lección -lo dice con esa sonrisa torcida que me encanta.
Me sigue envistiendo muy rápido y fuerte y cuando ya estoy a punto de llegar al orgasmo nuevamente paró.
-De quien eres?
-Oh dios, ahora no, sigue, por favor -suplico.
-Dilo o me marcharé.
Completamente desesperada no puedo evitar caludicar -soy tuya , tuya.
En ese momento reanuda las envestidas y un minuto más tarde terminamos en un orgasmo bastante más fuerte que el anterior.
Los dos caemos exhaustos en el suelo.
-Esto no se ha acabado, querida, prepárate -me dice Jon volviendo a besarme el cuello.
Por Dios, este hombre es insaciable.

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Este es un capítulo especial dedicado para @samoubiyustvo21

Kisses.