4_ Que me pasa?

655 65 5
                                    

Gustabo

Unos golpes contra la ventana del patrulla me despertaron sobresaltado,  abrí mis ojos con dificultad.

Una mirada oscura me observaba fijamente desde afuera del vehículo en el que me encontraba recostado.

- Que haces durmiendo en el patrulla neno? - reconocí su voz enseguida.
<< No puede ser! >>

- Freddy? Que haces tan temprano en comisaría?
- No me respondiste pavo? Por qué estas durmiendo dentro del coche? -  volvió a preguntar con tono autoritario, claramente molesto por mi evasión a la pregunta.

No sabia que responder, sentía mucha vergüenza admitir que siempre dormía ahí.

Desde hacía un par de semanas Freddy llegaba todas las mañanas a comisaría más temprano para ir a desayunar juntos, pero ese día por algún extraño motivo, llego más temprano de lo normal.

- Lo lamento Freddy, no volverá a ocurrir - dije agachando la cabeza para evitar mirarlo.

Sinceramente su miraba me causaba escalofríos. Era tan penetrante que sentía que podía ver mi alma.

Salí rápido del coche y me dirigí a los baños. Caminé lo mas rápido posible para evitar las preguntas, pero Freddy me seguía detrás por el pasillo.

No quería mirarlo, me sentía muy avergonzado por toda la situación.

Siempre intente evitar que algún compañero me vea dormir dentro del patrulla. Aunque creía que muchos lo sospechaban.

Solo Isidoro era quien lo sabía realmente.

- Tuviste problemas en tu casa neno? Puedes decirme - hablaba el mayor con insistencia mientras caminaba detrás mío.
- No, no paso nada Freddy - respondí.

De repente tomo mi brazo con fuerza y detuvo mi huida.

- Por que me mientes?
- Eeeeeeh n-no miento. - no sabia que decirle. Realmente no mentía, solo no le daba la información que él buscaba.

- Mírame a la cara y dime por que estabas durmiendo en el patrulla neno - dijo con voz firme y seria.

Levante la mirada lentamente hasta hacer contacto visual dispuesto a confesarle todo.

- No tengo a donde ir, vale? Por eso me quedo durmiendo en el patrulla - hable bajo, muy bajo. Pero estaba seguro que me había escuchado porque su mirada cambió de repente, parecía desconcertado por lo que le acababa de escuchar. - No volverá a ocurrir, puedo ir a cualquier otro lugar - baje rápido la mirada nuevamente.

El mayor tomo mi mentón con su mano, el frío del cuero negro de su guante me erizo la piel.
Levanto mi cabeza para que lo mirara a los ojos.
- Como que no tienes casa neno? Y por que nunca dijiste nada?
-  Bueno, n-no lo se. Mi intención tampoco no es molestar, la verdad.
- Conway sabe que duermes aquí? - me pregunto sin soltarme y mirándome fijamente.
- No!!! Y no le digas por favor. No quiero tener esta conversación con el viejo, en serio. - le dije casi suplicando.

Se quedo mirándome con una expresión que supe distinguir si era enojo u otra cosa.

Era extraño que no me suelte, ya me empezaba a incomodar, realmente no era muy fan del contacto físico.

Aunque realmente había algo más extraño, mi respiración se aceleraba por tenerlo tan cerca. Era algo incontrolable.

- Báñate y cámbiate así vamos por el café - me soltó, dio media vuelta y se fue rápido.

Lo más rápido que pude me duche y fui al vestuario a vestirme.
Hoy iba a usar la camisa verde militar arremangada y las zapatillas de siempre haciendo juego.

Los Santos del infierno.  Pólvora Y Fuego.   Donde viven las historias. Descúbrelo ahora