Convivir con el enemigo

Tres amigos y una conversación loca

Meses atrás... (Antes del desastre)

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Era medio día y era la hora del almuerzo.

Era un local con platillos variados y buena comida en el centro de la ciudad, así que iba una buena cantidad de gente allí.

En una de las mesas ocupadas se estaba iniciando una conversación.

-¿Y bien?

-¿Bien, que Gabby?

Un joven adulto con cicatrices en el rostro estaba sentado a gusto comiéndose una hamburguesa (para ligero disgusto de alguien) con sus dos mejores amigos.

-¿Qué tal tu vida Tom?, ¿Cómo la pasas, que has hecho, le has disparado a un bandido, compraste ese nuevo Shampoo?; Vamos hace mucho que no nos ponemos al día- Comentaba una joven morena señalándolo con un tenedor de ensaladas.

-No mucho.

-¿Es enserio? ¿Y el Shampoo?

-Me dio alergia.

-¿Y eso es todo...?

-¿Qué? ¿Querías que me muriera?

-¿Qué?, por supuesto que no, solo quería saber de tu vida y tú me dices nada. Vamos Tom eres policía, seguro que tienes historias locas o muchas cosas que hacer.

-Bueno...no hay mucho, estoy en patrullas e investigaciones de perfiles y casos criminales.

-Uhhhh cuenta, cuenta...

-Eso es información confidencial.

-Ahhh vamos....

Y de ahí seguía la conversación en trivialidades y preguntas impulsivas.

El joven con el cabello de dos tonos de color, el cual estaba observando la interacción de los otros sin decir palabra alguna, prefería comer sus ravioli escuchando sin inmutarse de las locuras que se soltaban en la mesa.

Para muchos la conversación se volvería demasiado intensa.

Para Aiden era otra conversación de un viernes de medio día.

Después de un buen rato decidió hablar.

-¿Y tú Gabby, cuentas algo nuevo? – pregunta el E-boy.

-¿Eh?, oh SI SI SI SI, ¿ADIVINEN? – la joven dejando olvidada la conversación anterior, mostrando una actitud extasiada.

Ambos hombres se miraron un momento antes de responder.

-¿Encontraste un patito en el parque?

-¿Te cancelaron la multa por la manifestación al frente de la carnicería?

-Ojala y no, pero MEJOR AUN...- tomando una pausa para proseguir- la del patito también hubiera sido buena, pero esto es igual de increíble.

-¿Qué cosa?

-¿Recuerdan de esa joven pelirroja de que les hablaba tanto, la que estudiaba diseños de moda y trabaja en esa linda pastelería?

-Ahhh si...

-Ellie

-Si ya lo sabía.

-Que creen ME ACEPTO UNA CITA, DIOS MIO, DIOS MIO, LO PUEDES CREER...PUES YO NO, PERO AUN ASI PASO.

El grito de júbilo fue tan fuerte que casi le saca el corazón al pobre mesero que esta limpiaba en las otras mesas.

Aiden y Tom se sentían un poco avergonzados de como muchos comensales y uno que otro trabajador se le quedaban viendo a su mesa.