Capitulo 3 🌸

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Mientras regresaba a casa, con las bolsas llenas de las compras para mi padre, noté un trozo de papel arrugado en el suelo, justo frente a la entrada de nuestra casa. Me agaché para recogerlo, curiosa por su contenido, y descubrí que era una carta sin sobre ni dirección, como si hubiera sido dejada allí deliberadamente para que alguien la encontrara.

Mis dedos temblaron ligeramente mientras abría la carta y comenzaba a leer. Las palabras escritas a mano en el papel me atraparon de inmediato, y mi corazón latía con anticipación mientras absorbía cada línea de su mensaje.

Mi querida descendiente

Llega el momento en que la oscuridad y la luz se enfrentarán una vez más, y el destino de nuestra familia descansará en manos de una sola persona. La Luna de Brujas está a poco tiempo, y con ella, se acerca la hora de la verdad. Debes estar lista, pues el legado de nuestros ancestros te reclama, y solo tú tienes el poder de cambiar el curso de la historia, eres lo que hemos estado esperando por siglos.

Busca en lo más profundo de tu corazón y encontrarás la fuerza que necesitas para enfrentar los desafíos que se avecinan. Recuerda quién eres y de dónde vienes, pues en tus venas corre la sangre de las brujas que vinieron antes que tú. Confía en ti misma y en aquellos que te rodean, pues juntos, pueden superar cualquier obstáculo que se interponga en su camino.

El destino te llama, querida descendiente, y es hora de que respondas.

Un escalofrío recorrió mi espalda mientras leía las palabras impresas en el papel, y mi mente se llenó de preguntas sin respuesta. ¿Quién había escrito esta carta y por qué estaba en la puerta de mi casa? ¿Tendría esto algo que ver con el sentimiento de incertidumbre que había estado experimentando últimamente? 

Mis pensamientos fueron interrumpidos por la visión de una figura familiar parada detrás al árbol que se alzaba majestuoso en el patio delantero de nuestra casa. La misma mujer mayor a la que había visto en la cafetería, con sus ojos oscuros llenos de conocimiento ancestral, me miraba fijamente desde la distancia, como si supiera exactamente lo que estaba pasando por mi mente.

Un escalofrío de reconocimiento me recorrió mientras nuestros ojos se encontraban en un silencioso intercambio de comprensión. ¿Quién era esta misteriosa mujer? Con el corazón latiendo con una mezcla de emoción y aprensión entre por las puertas de la casa, depositando las bolsas que habia traído del mercado en la cocina. 



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