Luna de brujas

Capítulo 18 🌸

Me sorprendió la forma en que la mujer me observaba fijamente, con una expresión de extrañeza palpable en su rostro. Se acercaba a mí con determinación, sus ojos penetrantes buscando algo en los míos. Luego, de repente, desvió la mirada hacia Arthur. En ese instante, como si una fuerza invisible lo controlara, Arthur se volteó y, con una excusa apresurada, se alejó rápidamente. La mujer parecía indiferente a su partida, incluso se acercó más hacia mí mientras él se retiraba, como si estuviera esperando ese momento para actuar.
Su proximidad me inquietaba, pero antes de que pudiera reaccionar, la mujer tomó mi brazo con firmeza y me condujo hacia una de las aulas cercanas. No pronunció una sola palabra durante el trayecto, y el silencio que nos rodeaba era abrumador. Mis pensamientos se agolpaban en mi mente mientras caminábamos, tratando de comprender qué estaba sucediendo.

Finalmente, llegamos a la puerta del aula y la mujer me empujó suavemente hacia adentro, cerrando la puerta tras de nosotros. El aire dentro del aula era tenso y cargado de anticipación, como si algo importante estuviera a punto de suceder.

—Te estaba buscando —dijo la mujer al fin, su voz resonando en el silencio de la habitación. Su declaración me dejó desconcertada, y una sensación de inquietud se apoderó de mí. ¿Por qué me estaba buscando? ¿Qué quería de mí? Las preguntas se agolpaban en mi mente, pero antes de que pudiera articular alguna respuesta, la mujer continuó hablando.  — La carta no llego a tus manos?, debo imaginar que si. Ellas te estan persiguiendo, debo imaginar que ha de ser extraño para ti esto de las brujas y las habilidades que has de estar descubriendo en los últimos días, ha de ser abrumador.

Las palabras de la mujer resonaban en mi mente como un eco inquietante, y su revelación sobre la carta solo añadía más confusión a mi ya turbulenta situación. ¿Cómo sabía ella sobre la carta? ¿Y quiénes eran "ellas" a las que se refería? Las preguntas se agolpaban en mi mente, pero antes de que pudiera articular alguna respuesta, la mujer continuó hablando, sumergiéndome aún más en un mar de incertidumbre. 

—Las fuerzas que te persiguen son poderosas y peligrosas —dijo, su voz cargada de seriedad y un atisbo de preocupación—. Son brujas, pero no como las conoces en las historias de cuentos de hadas. Están vinculadas a antiguas tradiciones y rituales, y tienen habilidades que desafían la lógica y la razón. Eres su objetivo, y no te dejarán en paz hasta que obtengan lo que buscan.

Su descripción me dejó paralizada, incapaz de asimilar completamente lo que estaba escuchando. ¿Brujas? ¿Habilidades sobrenaturales? Todo sonaba como algo sacado de una película de fantasía, pero la seriedad en los ojos de la mujer me decía que no estaba bromeando.

—Pero no estás sola en esto —continuó—. Hay otras jóvenes como tú, que han alcanzado la edad de la mayoría de edad y están despertando a sus propias habilidades. Juntas, pueden ayudarse mutuamente y enfrentar las corrientes.

Sus palabras resonaban en mi cabeza, y me sentí abrumada por la magnitud de lo que estaba enfrentando. ¿Cómo podía enfrentarme a algo oscuro y poderoso? ¿Y quiénes eran esas otras jóvenes de las que hablaba la mujer?

—¿Quiénes me están buscando y por qué a mí? —pregunté, mi voz apenas un susurro en el aire cargado de la habitación.

La mujer se mantuvo en silencio por un momento, como si estuviera escogiendo sus palabras con cuidado antes de responder.

—Eres especial, Amara. Creo que aún no sabes mucho de esto. Permíteme explicarte. Yo pertenezco a las brujas del otro lado, como muchos las conocen: brujas blancas. No vivimos exactamente en este mundo que tú conoces; hemos construido uno propio a lo largo de los años. Sin embargo, también existen otras, las brujas oscuras. Están ubicadas a tu alrededor, ocultas en las sombras, y son ellas las que te buscan. Al menos eso me han informado. Mi misión es asegurarme de que no te unas a ellas.

Sus palabras me dejaron atónita. ¿Brujas del otro lado? ¿Un mundo aparte del nuestro? Era difícil de asimilar. Pero antes de que pudiera formular más preguntas, la mujer continuó.

—¿Alguna se ha comunicado contigo? —inquirió, su mirada penetrante buscando cualquier indicio en mi expresión.

Las palabras de la mujer me dejaron sin aliento, y mi mente luchaba por procesar la información que acababa de recibir. ¿Brujas del otro lado? ¿Un mundo construido aparte del nuestro? Todo sonaba increíblemente surrealista, pero la intensidad en los ojos de la mujer me decía que hablaba con sinceridad.

—No, ninguna se ha comunicado conmigo —respondí, mi voz apenas un susurro tembloroso—. Todo esto es tan... abrumador. No sé qué hacer, ni siquiera entiendo por qué me están buscando.

La mujer asintió con comprensión, y su expresión se suavizó ligeramente.

—Lo sé, Amara. Es mucho para procesar de una vez, pero debes saber que no estás sola en esto. Las brujas del otro lado están aquí para ayudarte, para protegerte de las fuerzas oscuras que te persiguen. Pero necesitamos que confíes en nosotros, que nos permitas guiarte y protegerte en este viaje.

Sus palabras me reconfortaron un poco, pero el miedo seguía palpable en mi pecho. ¿Podía realmente confiar en esta mujer y en las brujas del otro lado? ¿Y qué pasaría si me unía a las fuerzas oscuras que me buscaban?

Antes de que pudiera articular más preguntas, un ruido repentino resonó fuera del aula, interrumpiendo nuestra conversación. La mujer se puso tensa de inmediato, su mirada alerta mientras escuchábamos los sonidos que se acercaban.

—Debes irte, no le cuentes de esto a nadie, espero poder guiarte y contarte mas luego — Solo asentí a sus palabras, estaba llena de intriga, miedo, preguntas, pero algo me decía que podía confiar en ella, quizas mis ansias de querer buscar respuestas ante los sucesos que ocurrieron los días pasados, no sabia que debía hacer, ni que decir, todo era muy extraño para mi, quien diría que realmente esa carta que encontré el día de mi cumpleaños era real, quien dirían que las brujas si existían y que probablemente yo si habia causado esos eventos sobrenaturales ocurridos en mi cumpleaños.