Los dos papis junto a sus tres pequeños se encontraban en la sala de estar, todos en pijama viendo una película familiar antes de la hora de acostarse de los pequeños.
Joaquín seguía en su acto de niño bueno, feliz de tener dos estrellas sin tanto esfuerzo, pensaba que era pan comido y solo cuestión de tiempo para lograrlo.
Por alguna razón se preguntaba porque desde que salió del baño Lucas se ve algo decaído.
Conforme a su papel de niño bueno, le estiro los brazos en una clara señal, que fue entendida rápidamente, de tal modo que Lucas lo cargo en sus brazos.
-Gracias- dijo Lucas en un susurro que no fue respondido, en su lugar Joaquín se acomodo en el espacio entre el cuello de Lucas, buscando calor, siendo acariciado suavemente en su espalda por Lucas .
No quiere admitirlo pero le encantaba esa posición, le daba paz y comodidad...es decir, solo lo hace para seguir con su fachada.
"Sí, por su puesto que sí" trato de convencerlo a sí mismo.
Estaba tan cómodo que casi maldice cuando sonó el timbre y los flojos de sus "hermanitos" e incluso su padre no hacían ni el amago de irse, por lo que Lucas aún con Joaquín en brazos, se fue a recibir la puerta.
Joaquín pensó con algo de risa que con un mandil, Lucas pasaría fácilmente como una ama de casa de los 80.
Lucas abrió la puerta revelando una figura ya conocida tanto como para papi y bebé.
-¡¿Mamá?!
-¡¿Señora Silver!?
Exclamaron ambos chicos ante la enorme mujer frente a ellos.
-Hola cariño- dijo Miriam a su hijo, cuando paso de mirar a Lucas a Joaquín, sorprendiéndose- vaya que es una coincidencia, jovencito, casi como si fuera ficción.
-¿Ustedes se conocen?- preguntó Lucas confundido.
-Es mi trabajadora social- respondió Joaquín.
-¿No te dieron esa información cuando lo adoptaron? preguntó Miriam entre confundida y molesta- O Dolly sigue siendo una incompetente o ustedes siguen abusando de sus cargos para agilizar tramites- dijo ponzoñosamente.
-Mamá, por favor- se limitó a decir Lucas, no queriendo iniciar una discusión.
-¿Qué dije? - dijo su madre haciéndose la desentendida.
-¿Quién era amor?- dijo en voz alta Mateo sin levantar la mirada de su partido de futbol.
-Tu suegra, querido yerno- dijo Miriam con firmeza logrando que Mateo se sobresaltara y casi se le cayera la cerveza que tenia en su mano.
-¿Y bien? ¿Acaso me tengo que agachar?- preguntó molesta por lo que considera una falta de educación.
Como si fuera un hechizo Mateo se levantó y le dio un beso en la mejilla a su suegra dándole la bienvenida.
-Así está mejor, pero lo mismo va para ustedes- habló con demanda hacia Diego y Rodrigo que la veían algo asustados- ¿Qué clase de caballeritos no saludan como corresponde a una dama? Si alguien no conoce los modales básicos ¿Cómo se supone que va a sobrevivir en el mudo de afuera? - regañó en una clara indirecta.
-Lo lamento, abuelita- dijo Rodrigo arrepentido caminando despacio con las manos en la espalda casi intimidado, en el poco tiempo que lo conoce Joaquín nunca lo había visto así.
Incluso en puntitas, Miriam tuvo que agacharse para que Rodrigo pudiera besarlo en la mejilla, Diego siguió el ejemplo de su hermano mayor, aunque no tan nervioso, también recibió a su abuela.
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Villa Júbilo (ABDL)
Teen FictionEl fin del Derecho Penal siempre ha sido la reinserción en la sociedad, hace cuatro años con la delincuencia en auge y las cárceles abarrotadas, el Estado no ha tenido más opción que aceptar la propuesta del entonces ministro del interior, Matthew...