Capitulo: 62

56 7 5
                                    






«decir todos mis pecados»
🎉🎉🎉🎉






















Habían pasado dos meses, mis proyectos en la universidad me mantenían ocupada, Hoy era Domingo, últimamente utilizaba los fines de semana para hacer una que otra tarea pendiente, y debes en cuando me veía con Hanma, aunque mayormente me veía más con Manjiro, solía estar más tiempo con él, Creo que estar con el me hacía estar mejor...

– hace demasiada calor – comenté soplandome con mi propia mano

– el sol es más fuerte hoy – hablo Manjiro mirando hacia el cielo cerrando un ojo

Habíamos decidido ir al cementerio llevar flores a la tumba de Shinichiro, aunque no solamente flores Mikey había comprado una caja de cigarrillos, ya que a Shinichiro le gustaba fumar cuando estaba con vida... llegamos hasta su tumba, Mikey tomo las flores y les quitó el papel donde las traía en vueltas, yo solté un pequeño estornudo

– ¿Estás bien? – me miro

– si, si – asentí con mi cabeza y me raque las nariz

El saco uno de los cigarros y lo encendió dejándolo encima de la tumba de Shinichiro, los demás cigarrillos los dejo dentro de la caja y se los dejo también ahí, se levantó y su puso alado mío mirando la tumba de su hermano,

– bien – hablo después de un rato de silencio – ¿Quieres ir a comer algo? –

– de hecho tengo que volver a casa – le recordé

– bien, te llevo entonces... –

Empezamos a caminar, de repente mire aquella tumba, La que solía ser de mi hermana... Detuve mis pasos y la mire

– pensé que la quitarían... – hablé mirándola

– tal vez tú madre no quiso hacerlo – respondió él

De repente recordé algo, cuando vine a dejar flores y encontré a alguien enfrente de ella, nunca supe quién era esa persona y tampoco quise decírselo a nadie...

– una vez... – hablé – ví a alguien en la tumba de mi hermana, no supe quién era la persona... pero cuando quise hablarle se fue de inmediato – le hice saber sin apartar la mirada de la tumba

– ahora que mencionas eso... – hablo él mirando también – también ví a alguien mirándola, creo que era una mujer... –

– ¿De verdad? – lo mire esta vez a él – ¿Por qué nunca me lo contaste? –

– ¿para que iba decírtelo?... Después de todo muchas personas entran a los cementerios... – se encogió de hombros él

– sabes... Siempre pensé que mi hermana había sido una buena persona – hablé mirándolo a él – pero me equivoqué Manjiro... –

Él no me respondió nada, se acercó a mi y me abrazo, yo correspondí a su abrazo

– no pienses eso ahora... – hablo acariciandome la cabeza – compremos algo de beber, me muero de sed – me sonrió

Yo asentí con mi cabeza, él tomo mi mano y empezamos a caminar, después de salir del cementerio decidió comprar algo de beber, la calor era terrible... Decidimos sentarnos un rato

– por cierto.... Emma me pidió que te diera esto – saco un sobre – es una invitación – menciono entregandomela

– ¿Para que es? – pregunte tomándola

Un Amor Para Siempre, (Wakasa Imaushi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora