Un Amor Para Siempre, (Wakasa Imaushi)

Capitulo: 63,

«La decisión final»
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Me desperté al día siguiente, había llorado inconsolablemente toda la noche, por alguna extraña razón me sentía culpable por lo que había pasado ayer, Kimura termino internada en el hospital, al parecer le afecto toda la discusión de ayer, creo que por esa razón me sentía peor... Me estaba amarrando el cabello era lunes y tenía que ir a la universidad... Mis ojos estaban hinchado y mi nariz roja, quisas se debía a que llore...

– ¡Debemos de hablar! – entro mi madre de golpe a mi habitación – Tú hermana está en un estado delicado – me hizo saber

Yo no la mire simplemente termine de amarrarme el cabello en una coleta alta

– ¿Y quieres que sienta remordimiento por el estado en el que está mi hermana? – comenté

Por supuesto que me interesaba el estado de Kimura, ¡Claro que me preocupaba su estado!, y por supuesto que sentía remordimiento... Pero no iba aceptarlo delante de mi madre... No soy tan dura de corazón ¡Por supuesto que no!

– eres una egoísta... – decía y su tono de voz sonó con rabia por mi actitud – así que he hablado con tú tía Yumeko... Llegamos a la conclusión de que no pueden vivir juntas –

– ¿Le dijiste todo a mi tía? – la mire decepcionada al saber

– ¡Necesitaba un consejo! – se defendió ella

– ¡¿Y tenías que preguntárselo a ella?! – dije molesta – ¡No pudiste arreglar los problemas internamente mamá!, ¡Tenias que contárselo a todo el mundo! –

De todas las personas que podían detestarme una de ellas era mi propia tía, la hermana mayor de mi madre, Era una señora gorda con mal carácter, mi tía pensaba que por arruinarle la vida a mis primos podía venir aruinarme la vida a mi también, solía decirme que tenía los mismos pensamientos ingenuos que mi padre y que jamás llegaría lejos como él lo hizo... Era detestable como me comparaba con mi padre... Quisas era una de las razones por las que llegue a odiar a mi padre...

– he decidido que te irás con tú tía por un tiempo –

– ¿Me estás corriendo de la casa? – pregunte

– necesitas un poco de espacio, al igual que tú hermana –

– ¡¿Y por eso me mandas con la tía Yumeko?! – exclamé molesta

– solo es por un tiempo... –

– ¡No puedes hacerme esto! – hablé molesta – ¡No puedes decidir por mi!, ¡Soy mayor de edad! –

– ¡Pero yo pago tú universidad!, ¡Cuando empieces a pagarte todo puedes tomar tus propias decisiones! – me grito molesta

No respondí, era injusto como me trataba a mi, yo mordí mi labio al punto de hacerme daño a mi misma, quería gritarle... Pero se que debía de controlarme

– entonces... ¿No creiste nada de lo que dije ayer? – pregunte

– tú hermana regreso de la muerte, tienes que entender... –

– ¡¿y por eso debo de perdonarle todo?! – interrumpí gritando – ¡¿Yo soy la mala?! – las lágrimas volvieron a salir

Odio esa parte de mi, enojarme y llorar, es algo de lo que odio hacer,

– ¡Que te vallas por un tiempo con tú tía no es el fin del mundo Sahori! –

– ¡No sabes nada! – grite – ¡Y tampoco espero que lo entiendas!, ¡No confías en mí!, ¡Nada de lo que digo es válido para ti! –