Capítulo 10. JASPER

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Ya llevamos tres semanas y las horas de clases nos resultan fascinantes. Hoy cuando terminamos vamos directos a casa. Al parecer Kiara ya ha vuelto porque en cuanto entramos oímos la música a todo volumen. ¿Es Reguetón? De repente Liam parece nervioso.

-Se me ha olvidado algo- está visiblemente desesperado- Vamos a buscarlo y volvemos.

-¿Qué dices?- lo miro confuso - Tengo hambre y por como huele, creo que el Demonio ha preparado una de esas comidas latinas.

Voy hasta el salón y me detengo en seco. Kiara ni nos ha escuchado llegar. Está con los shorts y una camisetita corta pero ancha que al parecer a roto con una tijera. Está de espaldas y por eso no nos ha visto. Está bailando de una manera increíblemente sexy. Se va tocando el cuerpo, moviendo las caderas y pareciendo que le han quitado una puta costilla. Tiene el pelo suelto que se levanta dejando a la vista el cuello y casi todo el torso perfecto. Empieza a abanicarse y veo a Liam entrar en pánico cuando ve que se quita la camiseta quedándose solo con el sujetador de deporte. Estoy en shock. Aparto, no sin cierta fuerza de voluntad, los ojos de Kiara para mirarlo. Me paso la mano por el pelo. Creo que ahora mismo quiere morirse.

-Eres un cabrón- le digo atando cabos- Ya sabía yo que esa desesperación tuya porque no pusiese música escondía algo. ¿Pero esto?, joder. ¿Desde cuando la viste bailar así?

-Desde la puta discoteca- lo miro entrecerrando los ojos.- La primera vez que la vi. Estaba escondida bailando y fue...madre mía.

-Ya, me lo imagino- digo girando la cabeza para estudiarla de nuevo- Y sospecho que lo hace solo para ti.

-Capullo- bufa.

Kiara por fin se da la vuelta y nos ve

-¡Qué susto joder!- parece confusa - ¿Qué hacéis ahí parados?

¿Lo dice en serio? Nos sonríe viniendo hacia nosotros sin percatarse ni un poco del estado en el que estamos ahora mismo. Y empiezo a comprender un poco la angustia de Liam, porque ella ni se de cuenta del efecto que provoca.

Sirve la comida. Yo tenía razón, es comida latina. Está muy buena. Son mezclas curiosas. Liam y yo vamos a cambiarnos. Cuando sale, nos ve a Kiara y a mi hablando y riéndonos en mi habitación. La puerta esta entreabierta, y sospecho que gracias a eso no se ha vuelto loco. Es que de verdad. Entra y nos callamos. Veo la pregunta en su cara de qué coño pasa. Ella está sentada en el borde de la cama y yo apoyado en el armario examinándolo divertido. Kiara se gira y le sonríe. Sé que esto no le gusta ni un poco y menos después de que la viera bailando.

Este idiota ni sospecha que el Demonio lleva casi dos semanas preparando su cumpleaños. Me he planteado seriamente hablar con él y decirle lo que ella me contó el día que se fue tan enfadado por el estúpido sueño. A ver si se les quita esa angustia que veo que los está consumiendo a los dos, temiendo perderse el uno al otro. Quiero saber, aunque creo conocer la respuesta, si a Liam le pasa lo mismo.

Al preguntarle a Kiara por ese día, al escuchar su respuesta, fui consciente más que antes de que yo nunca tuve nada que hacer. Incluso si en vez de él hubiera entrado yo en esa maldita discoteca. Porque al verse en el instituto, les habría pasado lo mismo aunque yo la conociese primero. Es cierto que esa chica me gusta, y mucho, pero ni de lejos he sentido jamás de lo que ella me habló. Y solo si él siente lo mismo, entiendo que estuviese así todo el verano y que fuese capaz de dejar por una vez de lado el rencor y el orgullo y volver con ella.

Voy a estar solo cuatro días. Me los pienso tomar para conocer la ciudad, ver cosas que me gusten a mi y relajarme. Ese es el plan, pero a última hora, después de que Liam se fuese con el Demonio, encuentro de nuevo a Beverly esperándome en las escaleras. Esta chica de verdad, me tiene confundido. No sé que pretende todavía, pero puede que en este tiempo libre, sin los intensos de mis amigos y sus movidas, descubra que se propone. Me acerco a ella sin que me vea y le tapo los ojos. Es un juego que teníamos cuando salíamos juntos y al darme cuenta me pregunto por qué coño lo he hecho. Beverly se echa a reír.

LLAMAS NEGRAS (2° Parte SAGA LABIOS NEGROS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora