Capítulo 34. JASPER

37 13 68
                                    

Sé con toda seguridad que cuando el Demonio me descubra me va a matar. Ya ha pasado casi un mes desde que nos enseñó la pizarra y me prohibió entrar en el ordenador de Einar. Al principio, intenté convencerla porque le tengo ganas a ese maldito desgraciado. Además, me lo tomo como un reto personal. Cuando vi que no cedía, hice otra cosa que no me especificó claramente que no podía. Liam y yo teníamos razón. El Aarón ese no tiene ni idea y colarme en su sistema fue tan fácil que hasta me aburrió. Como fue tan poco satisfactorio, entré también en el de los otros tres sospechosos. Michael, Daniel y Samy. Fue un juego de niños. No he visto lo que tienen porque tendría que darles explicaciones, pero estoy seguro que cuando consiga que entre en razón, podré por fin colarme en el ordenador de ese cabrón. Por ahora me conformo con esta pequeña victoria. Solo tengo que ver como coño se lo cuento.

Beverly me ha dicho que Kiara está muy rara, algo que ya he notado. Creo saber que le preocupa y mi amigo no se da ni cuenta. Me parece increíble que se ponga con ella así por el capullo de Arashi y ni se entere de que la tal Juliette, que no me gusta ni un poco, está haciendo lo mismo con él. Descubro lo realmente mal que está el Demonio justo hoy. Estamos en la oficina y ella no ha venido. Eso es muy extraño, porque sabemos lo en serio que se toma todo lo de su trabajo. Me decido y le pregunto al imbécil de Liam, a ver si ya tiene una ligera idea de lo que ocurre.

-¿Sabes por qué no ha venido hoy el Demonio?

-Ni idea- suspira y yo entrecierro los ojos- Últimamente está muy rara.

Quiero matarlo joder.

-Sí, Beverly también me lo ha comentado- le digo como si nada.

-Sabes, eso de Beverly, aunque sé que para ti es un alivio y todo eso, no me gusta mucho por Kiara.

-Sí, entiendo a que te refieres. Yo también lo he pensado. Es verdad que respiro tranquilo por no tener que estar en tensión pensando que se le ocurrirá para vengarse, pero no es propio de ella. Aunque dice que el psicólogo la ayuda, creo que no le ha contado mucho y ahora mismo, no sé si me angustia más que la haya perdonado.

-Es que lo está haciendo de nuevo, joder. Nos está poniendo a nosotros por delante de ella. Porque ni se me pasó por la cabeza que la perdonara después de lo hizo. De hecho, estaba seguro que solo estaba esperando su momento para atacar. ¿Pero hasta hacerse su amiga y ayudarla de esa forma? No sé- se le oye frustrado- Sabes, cuando nos reconciliamos me explicó algo que me inquietó.

Lo miro sin entender. Pensaba que me lo había contado todo.

-Le pregunté que me parecía raro que con esa cabeza maquinadora suya no hubiese intentado nada para salirse con la suya con lo de la movida de su padre y Einar, que ni siquiera se lo hubiese contado a sus abuelos que sin duda la ayudarían. Entonces me confesó que desde el principio tenía alguna idea y creía saber como librarse de todo -abro los ojos por la sorpresa- Pero lo que nunca se le pasó por la cabeza es que ese cabrón se muriese.

-Pero entonces, ¿por qué no hizo nada?- estoy confuso y asustado.

-Pensaba que se lo merecía. Por eso tampoco le contó a su familia lo que había pasado con su hermana realmente, veía lógico que la odiasen. Por eso se empeñó con tanta fuerza en alejarme. Que no tenía derecho a ser feliz si su hermana había sufrido así por su culpa. Incluso, me dijo, que podría haberse ido de casa de sus padres mucho antes, pero que era consiente de que Kaity no la acompañaría y no la dejaría sola nunca y que cuando ella lo hizo, sintió que si incluso su hermana lo había hecho, como no lo haría cualquiera. Y sigue igual, peor después de este puto verano. Por eso que haya perdonado a Beverly, me agobia y mucho.

-Joder, esto es una mierda- la situación me supera- Pero lo que no consigo entender, es ese odio que le tenía ese cabrón de su padre y que su familia al parecer estaba también muy dispuesta a hacerlo sin más.

LLAMAS NEGRAS (2° Parte SAGA LABIOS NEGROS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora