LLAMAS NEGRAS (2° Parte SAGA LABIOS NEGROS)

Capítulo 37. JASPER

Hoy había quedado para comer con Beverly, pero cuando ha bajado el Demonio, al ver su cara cuando Liam se iba tan alegremente con Juliette, la he llamado para preguntarle si no le importaba si mejor la buscaba para cenar cuando saliese. Le he explicado la situación, creyendo que me mandaría a la mierda, pero joder, ni siquiera le ha molestado. Me ha respondido, que viendo como se está portando Liam, lo entiende perfectamente y que mi amiga me necesita. De hecho, me ha confesado que está preocupada, no sin que me sorprendiese un poco, porque ha visto a Kiara muy sombría últimamente incluso en clase. Que siempre suele participar mucho y que hace un tiempo ni siquiera habla y parece que ni presta atención. Incluso cree que estuvo llorando porque cuando la vio tenía los ojos rojos e hinchados. Y cuando están solas le cuesta concentrarse. Lo voy a matar, en serio. Puedo llevarlo a un callejón y hacer que parezca un accidente.

Le digo al Demonio que vamos a dar una vuelta, pero me contesta que no me preocupe, que puede quedar con Arashi. Y entonces me preocupo más. Porque sé que ese tío está aprovechando la situación para confundirla y más después de conocer la existencia de la Juliette de los cojones, que no me gusta ni un poco y eso que no la conozco en persona. Le pido, que por favor salga conmigo, que Beverly no puede quedar hasta después del trabajo, que estoy aburrido y necesito su ayuda para los malditos regalos de Navidad. Me estudia con cara de sospecha al principio, pero consigo que al final acepte. Salimos y me doy cuenta de que está peor de lo que creí. Apenas habla y no para de hacer ese gesto molesto de morderse el interior del cachete, que nunca le había visto hacer antes y he notado que es cuando algo la preocupa y mucho. Entonces veo una tienda de música y creo que sé como animarla.

-Ven Demonio- le digo- Quiero enseñarte algo.

Hablo con el dependiente y me da un bajo. Empiezo a tocar y veo que la cara que se le ilumina.

-No sabía que tocabas Entrometido- me habla muy feliz- Nunca me lo habías dicho.

-Pues deberías ver a Liam con la batería y el piano- abre los ojos como si fuese lo más emocionante del mundo.

-¿Por qué nunca tocáis?- veo su curiosidad y suspiro.

-Bueno, en realidad es culpa mía. Cuando estuve en el instituto con Beverly, a ella le encantaba escucharme y tocar conmigo el piano. Cuando lo dejamos, yo destrocé todos los instrumentos. Liam nunca me preguntó, pero también dejó de hacerlo.

-Vaya- entrecierra los ojos pensativa- Es una lástima.

-¿Tú tocas algún instrumento Demonio?- la mirada se le pone triste por un momento.

-La verdad es que la del talento musical era Kaity. Siempre me decía en broma que por lo menos le había dejado algo a ella. Solo sé tocar a cuatro manos porque ella me guiaba y desde lo que pasó no he vuelto ni a planteármelo.

-¿Quieres que lo intentemos juntos? A Liam se le da mejor, pero por probar- le doy un beso en el pelo y parece contenta de nuevo.

-¿Por qué no?- asiente con melancolía.

Nos sentamos y tocamos algo fácil. A ella no se le demasiado bien, pero podría ser peor. Cuando terminamos se ríe por fin.

-Somos un desastre Jasper. Pero creo que lo tuyo ha sido más por mi culpa. Seguro que lo has hecho a propósito para que no me sintiera mal- en realidad tiene razón, pero no le digo nada.

Vamos a comer y veo como va revolviendo lo que tiene en el plato. La obligo con la excusa de que lo necesita para las pastillas. Suspira, pero me hace caso. Le vibra el móvil y al verlo su expresión es de tristeza absoluta. Se la ve derrotada.

-¿Qué pasa? ¿Malas noticias?- le pregunto temiendo que sea un mensaje de los acosadores- ¿Son ellos otra vez?

-No. Es Liam. Dice que no lo espere para la cena, que llegará tarde- sonríe y sé que ese gesto es fingido.