Crystal Tears

22 - Sospecha

JIMIN POV

Empecé a separar los blancos y los colores monótonamente en nuestro cuarto de lavado. Se sentía bien estar en casa, pero las tareas del hogar eran un infierno. Colores en una pila, blancos en la lavadora. Aburrido.

Habíamos regresado de España hace tres días, y después de descansar, ahora era el momento de volver a la vida. Sin embargo, dos semanas fuera fueron hermosas. Después del robo, todo salió bien. No teníamos que preocuparnos por delitos o negocios y nos enfocamos en perdernos en el esplendor español.

La gente de seguridad del banco me llamó y me informó de mi "anillo perdido". No fue tan difícil llorar debido a mis hormonas, así que monté un espectáculo por teléfono. Los amenacé con demandar e incluso logré que Jungkook les gritara durante un par de minutos. Entonces sacamos todo el incidente de nuestras mentes. No sabía qué había en la caja de seguridad que robó, y no pregunté. Cuando se trataba de esto, cuanto menos supiera, mejor.

Después de un par de días de descanso, volví a ser el Jimin normal. El que hacía las tareas y se iba a trabajar. Sin embargo, tuve que dormir veinticuatro horas completas. Creo que fue así de largo. No estaba muy seguro entre el desfase horario y mi agotamiento. Jungkook, desafortunadamente, no tuvo la oportunidad de dormir. Regresó al trabajo y ya se veía agotado. Era como si nuestras vacaciones no hubieran sucedido en absoluto.

Un alto silbido sonó detrás de mí, y me di la vuelta rápidamente.

"¡Santa mierda!" chillé. "¡Alec!"

Valentino se deslizaba por el suelo. No era amenazante, y la mayor parte del tiempo me olvidaba de él, pero aun así me acechaba. Alec dijo que nos había extrañado mientras estábamos fuera. Se acercó a mí y frotó su cabeza en mi pierna.

"Oh, lo siento, Jimin". Alec entró y lo levantó. "Estoy limpiando su jaula. Olvidé que estaba aquí".

"No puedes hacer eso". Pisoteé mi pie. "Cuando el bebé llegue aquí, esa cosa no puede entrar. Lo digo en serio".

"Lo sé, tendré más cuidado". Envolvió a Valentino alrededor de su cuello y brazos, sacándolo.

Diez minutos después, Alec estaba de regreso.

"Jimin, no puedo encontrar mi buso gris". Entró en el cuarto de lavado sin camisa. "¿Sabes de cual estoy hablando?"

"¿El de las rayas azules o el blanco?"

"El blanco. ¿Dónde está?" Revisó los cestos de la ropa. "Sé que lo dejé aquí en alguna parte".

"No lo sé. Todavía no lo he lavado, pero si limpiaras tu habitación una vez al mes, podrías encontrar algo".

"A Anne le encanta esa cosa", pensó en voz alta. "Quería usarlo para nuestra cita para almorzar hoy".

Las probabilidades eran: de que ella lo tenía, pero no le dije eso.

"Aparecerá", le dije. "Toma, ponte esto". Le entregué algo más.

"Está bien, está bien". Se lo pasó por la cabeza.

"¿Estás listo para las clases de verano?" Pregunté.

"No, pero iré porque me estás obligando".

"Tienes que ponerte al día. Ya estás atrasado por perderte un semestre completo".

El calendario escolar regular había terminado, pero Alec aún necesitaba estar en la escuela. Jungkook y yo lo estábamos obligando a tomar algunas clases durante el verano. Eso no le gustó mucho. Pero no era como si tuviera elección en el asunto.

"Odio la escuela." Se cruzó de brazos, apoyándose en la secadora.

"La escuela es buena para ti".

"Todavía la odio". Alec consultó su reloj. "Mierda, me tengo que ir".