-Anya, despierta -La voz de Adeline me saco de mis sueños, se veía preocupada.

-¿Qué pasa? -Pregunte exaltada.

-Él está aquí.

-Mierda -Me levanté rápidamente del suelo, y corrí hasta ocultarme detrás de un arbusto. Ahí se encontraban los demas, al parecer la única que estaba durmiendo aún era yo-. No lo veo, ¿dónde está?

-Fui al... baño y vi que alguien se acercaba, estaba por pedir ayuda pero de pronto me di cuenta de que era él, así que vine lo más rápido posible a avisarles, debe de estar cerca -Los rulos de Marc se encontraban alborotados, debajo de sus ojos apenas se notaba unas ojeras, parecía exsausto.

-Alli está -Chillo la pelirroja en voz baja.

De pronto, por detrás de unos árboles salió un hombre vestido de negro, su rostro iba tapado por una máscara del mismo color y su cabello no se alcanzaba a ver por la capucha de su abrigo.

-Ocultate más y guarda silencio, Adeline -Voltee para ver a Andrew, él sostenía la muñeca de la pelirroja y tiraba de ella delicadamente, giandola a ocultarse un poco más.

-¿Qué haremos? -Las manos de Derek se movían rápidamente.

Comenzaron a hablar en señas.

-No podemos salir de aquí, él se daría cuenta.

-No podemos esperar aquí por siempre.

-No nos queda otra opción, él nos escucharía al intentar escaparnos, debemos esperar.

-Si tenemos otra opción -Andrew parecía concentrado en sus pensamientos pero aún así hablo.

-¿Cuál? -Pregunte.

-Atacarlo y acabar con esto de una vez.

-¿Te has vuelto loco acaso...?

-Yo lo haré -Interrumpio poniéndose de pie, lo tomé de la muñeca e intenté tirar de él pero no se inmutó-. Vengare a Megan.

-¿De qué hablas? ¡No puedes, Andrew! ¡Por favor! -Suplique.

Él se safo de mí agarre de un tirón, haciéndome caer sentada.

-¡Maldito desgraciado! -Vocifero el pelirrojo enojado, el hombre que parecía estar buscando algo se incorporó rápidamente, sus hombros parecían tensos.

Sin decir más, salió de los arbustos y corrió hasta el hombre. Este no volteo hasta tener a Andrew lo suficientemente cerca como para tomarlo del cuello y estamparlo contra el piso. Ahogue un grito cuando vi que sacaba un cuchillo de su bota derecha y se lo enterraba en el hombro a mí amigo. Este soltó un quejido de dolor. Derek y Marc hicieron un ademán de ir a ayudarlo pero Andrew lo volteo dejándolo debajo de él, reteniendolo.

Desenterró el cuchillo de su hombro soltando un gemido de dolor y cuando estuvo apunto de enterrar el arma en el desconocido este la agarró con ambas manos haciendo que hilos de sangre resbalaran por sus brazos. El pelirrojo desvío el ataque al muzlo derecho del individuo haciéndolo quejar de la aflicción.

-¡Váyanse! ¡Huyan! -Grito desesperadamente, el hombre se removía debajo de él. Mí amigo le dio un puñetazo y enredo sus manos alrededor de su cuello-. ¡Váyanse de una maldita vez!

Sentí que alguien me tomaba de la muñeca y me levantaba del suelo para luego arrastrarme lejos de ahí, lágrimas se formaron rápidamente en mis ojos dejando mí vista nublada.

Lo habíamos abandonado.

-¡Muévete más rápido, Anya!

Lo habíamos abandonado igual que a Megan.

-¡Maldita sea!

Todos dejamos de correr al escuchar el ruido seco, duro y rápido de un disparo. Nos mirámos entre si, asustados, sabíamos lo que eso significaba.

-No... No -Adeline negó rápidamente con la cabeza mientras lágrimas rodaban por sus mejillas.

Derek se limito a soltar insultos y a seguir corriendo, arrastrándome con él aún de la muñeca. Marc, en cambio, se detuvo un momento para pensar.

-Al menos, ¿sabemos dónde iremos? -Pregunto él con el ceño fruncido.

El pelinegro se detuvo al instante.

-Seguimos lejos de la Jeep, no podemos ir hasta allí. Sería un riesgo.

-Ahora mismo, cualquier sitio es un riesgo y más este sino nos movemos rápido.

Derek tenía razón, a pesar de la abundante vegetación en ese lugar no se encontraban los suficientes árboles que pudieran cubrirnos de cualquier ataque.

-Debemos volver al campamento -Murmure.

Todos se volvieron hacia mí con una expresión de horror.

-¡¿Qué?! ¡Te has vuelto loca!

-No. Estaremos bien ahi, al menos por el momento.

-¿Cómo dices? -La expresión de perplejidad de Derek me hizo saber lo que pensaba al respecto.

-Acabamos de escapar de ahí -El ceño de Marc se frunció aún más.

-No, escapamos del lago -Aclare rápidamente, intentando que entendieran sin la necesidad de explicar.

Pero no fue así.

-Cuando volvi a por las cervezas estás no estaban... -Explique.

-Tambien estaba todo fuera de orden, como si alguien hubiese estado buscado algo -Continuo Marc, entendiendolo.

-Si volvemos estaremos a salvo por el momento. Tal vez piense que no volveríamos al mismo lugar del que acabamos de escapar, ¿lo entienden?

Escuché como Derek maldecía en voz baja, el camino nuevamente hasta el campamento era algo largo, pero era una de nuestras pocas opciones.

-Yo te apoyo, Anya.

Observé a Adeline, ella asintió con la cabeza. Por último fijé mí mirada en Derek, él lo pensó un poco más.

-Debemos movernos rápido. Hagámoslo.

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