One-shots (Gustabowl/Tonibowl)

Tulipanes amarillos (G)

El día que menos quería que llegara simplemente llegó, el cumpleaños de Gustabo una fecha que él mismo odiaba porque hacía cuatro años que no pasaba un buen cumpleaños y llegó un momento donde esa fecha la aborrecía haciendo que hasta rezara porque nadie se acordara.

El rubio se despertó en comisaría como todos los días específicamente en el ascensor, sitio que nadie utilizaba ya que no hacía su función de manera correcta y por ende un lugar al cuál ninguna persona entraba, el ojiceleste se estiró y salió de aquel ascensor para luego ir a los vestuarios a cambiarse de ropa encontrándose de cara con Isidoro quien al verlo sonrió y le abrazó tomando por sorpresa a Gustabo quien se dejó abrazar sin corresponderle.

-Gustabito, Feliz cumpleaños-le felicitó el ojiverde para luego separarse del abrazo y extenderle un regalo en una pequeña caja.-para celebrarlo podríamos ir todos al C vería,  un bar o en mi casa-Isidoro estaba más emocionado que el propio Gustabo y es que le gustaba el hecho de que cumpliera años ya que había estado planeando su fiesta por mucho tiempo luego de que por insistencia le dijera cuando los cumplía.

-Gracias Isidoro pero no hace falta la fiesta no me gusta celebrarlo-se guardo aquella pequeña caja en su bolsillo para abrirlo más tarde y siguió su camino hacia el vestuario siendo seguido por Isidoro quien no se separaba ni un milímetro.

-Gustabo a mi si me importa tu cumpleaños, me importa cuando viniste al mundo y si no quieres una fiesta podemos celebrar los dos tomando una copa-el del corazón en el pelo tenía claro que iba a pasar aquel día tan especial con el ojiceleste quien solo lo miró sorprendido por tal insistencia en un día cualquiera.

-Rubia ¿patrullas hoy conmigo? Conway no se va a enterar-le pidió el comisario mientras sonreía, ninguno de los presentes sabía cuanto tiempo llevaba ahí, el rubio dudó aceptar debido a que siempre que patrullaban pasaban cosas malas y terminaban metiéndose en líos y por eso Conway prohibió que patrullaran juntos.

-como nos pille patrullando te echaré la culpa a tí-el ojiceleste levantó de forma leve las manos y se cambió la camisa de forma rápida antes de salir de los vestuarios de forma tranquila después de guardar el regalo de Isidoro en su taquilla.

-tete no hagas que el día de Gustabo sea malo-le pidió el oficial primero mientras se apoyaba en la puerta del casillero de Gustabo el cuál tenía una pegatina de mariposa azul en este.

-no me toques los cojones neno, me da igual que estés celoso-tan solo dijo eso antes de irse a buscar al rubio quien estaba esperándolo en el parking con un patrulla.

-hasta que llegas joder ¿que estabas haciendo? Llevo esperándote diez minutos-se subió de copiloto miró como el pelinegro se subía al vehículo para conducir con una leve sonrisa en el rostro.

-Isidoro me entretuvo pero no te preocupes rubia ¿hoy te apetece ir a comer algo o a cenar? Sé que es tu cumpleaños y aunque soy consciente que no quieres celebrarlo pero una cena no estaría mal, prometo no cantarte aunque si te voy a llevar una magdalena con una vela eh -ofreció el gallego con una sonrisa en el rostro para luego colocar su mano en la mejilla del contrario para que le mirara a los ojos antes de empezar a conducir.

-me parece buen plan-comentó riendo Gustabo quien en su interior sentía como su corazón se aceleraba al pensar en pasar el día con Freddy.

Por otro lado Isidoro estaba nervioso, había preparado la cita perfecta y es que el ojiverde amaba al rubio desde hacía tiempo y aunque al ojiceleste no le hubiera dado tiempo a decirle que sí iba a ir a pasar su cumpleaños con él, tenía fe en ello, era consciente que su amor hacia Gustabo era completamente unilateral y aquello le dolia porque por más que había intentado no amarle no conseguía hacerlo, no podía sacarlo de su mente, no podía aceptar que le gustara Freddy y sobretodo no podía soportar que no se diera cuenta de su amor y de que solo lo viera como un "buen amigo" cuando Isidoro solo quería verlo feliz, quería desearle los buenos días, los buenas noches, quería besarle y abrazarle hasta que se hartara de recibir tanto amor.

-¿viste la cara de la camarera?-la voz de Gustabo resonaba por los pasillos de comisaría acompañada por la de Freddy quien reía mientras el rubio hablaba, en cuentión de minutos el ojiceleste estaba solo dirgiendose a los vestuarios por el pasillo porque el gallego tuvo que irse ya que Conway le había reclamado para una reunión.

-Gustabito, te estuve esperando, quedamos en celebrar tu cumpleaños juntos-el ojiverde agarró de la mano al nombrado mientras trataba de buscar una mirada de amor en aquellos ojos azules que lo llevaban a lo más profundo del mar, unos ojos tan fríos y gélidos aunque aveces mirarlos hacía que sintieras una calidez indescriptible.

-yo...fui a cenar con Freddy para celebrar, ya me iba a casa-miró al contrario a quien se le cristalizaron sus ojos con escuchar esas palabras las cuáles no deseaba escuchar.

-pero...yo estuve días planeando esto, por favor no me dejes plantado yo...no importa, espero que lo hayas pasado bien con él-trató de sonreír aunque no quería hacerlo ¿como iba a sonreir luego de aquello?-toma, disfruta de tu noche-le extendió un ramo de tulipanes amarillos y se lo dió antes de irse casi corriendo de comisaría bajo la atenta mirada de Gustabo quien miró las flores sin saber como reaccionar a aquello, agarró la nota que había en ellas y la leyó "Gustabo siempre fuiste tú, tu siempre has sido mi mundo y en cada momento me gustaste, haces que mi corazón enloquezca y se pare como un reloj roto. Se que no sabes que significan estos tulipanes, pero por eso te lo haré saber, significan amor unilateral porque eso es lo que tenemos nosotros y soy consciente de ello, por más que intenté dejar de amarte nunca pude dejar de mirarte con amor".

-porque no me lo dijiste antes-hizo una pausa mientras miraba las flores- cuando aún estaba enamorado de tí-se quejó en un susurro guardando la nota en su bolsillo y fue hacía su taquilla, la abrió y observó el regalo que le había dado Isidoro por la mañana, lo agarró y lo abrió con cuidado, en cuanto lo vio sonrió levemente, era un collar con un pequeño tulipán azul junto con uno verde, dejó las flores en el banco de los vestuarios y se lo puso para luego admirarlo mientras suspiraba, cerró su taquilla y puso su mano en la puerta, encima de aquella pegatina de mariposa que tantos recuerdos le brindaba.

Si ven que no actualizo el Nadantado es porque no tengo tiempo y este one-shot no me come tanto. Gracias por leer💗🫡