Maratón 6/8 Una disculpa por no completarselos ayer :(
Las de la multimedia serán muy importantes después de este capítulo, solo que la pelinegra tiene que tener los ojos grises..
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Narrador Omnisciente
Ambos chicos se fueron de ahí, una no podía caminar bien y el otro todavía tenía ganas, no sabían que había pasado por sus cabezas cuando hicieron eso, el placer y el deseo los cegó por completo que se dejaron llevar.
Atenea se despidió de Peter para luego irse a dormir.
A la mañana siguiente desperto Atenea temprano, muy temprano. Había dormido unas dos horas pero no tenía sueño, algo la llamaba y no lo podía ignorar, se levantó de la cama y tomó unas bragas que tenía ahí, ya que la otra se las había roto Peter.
Se cambió y se hizo una coleta improvisada, salió de la cabaña y decidió explorar ya que no vio nadie a despierto. Revisó alrerdor del campamento y al ver que no había nada salió de ese lugar, exploró zonas que ella no había visto antes.
Escucho unas voces a lado de varios arbustos, saco su abanico con dagas y poco a poco se acercó ahí teniendo cuidado. Si la descubrieran la podían matar incluso.
Pero eso no pasaría.
Ya sabia quienes eran y sonrio burlonamente.
Hay que meterles miedo.
Tal vez pero nos pueden descubrir.
Nadie nos va a descubrir.
Además le duelen las piernas, si me llegan a descubrir no podré correr.
Quien te manda a revolcarte con Pan.
¡Dejame ya!
Bueno, pero a la otra no te salvaras.
Ignoro su conciencia y camino al rededor de ellos sin ser vista.
— ¿Escucharon eso? —pregunta el príncipe encantador.
— ¿Que? —pregunta Regina.
— Un ruido en los abustos de allá —señalo el lugar donde estaba antes Atenea, que se movió rápidamente de ese lugar.
<< Idiotas >> Pensó Atenea.
Esta sonrio y se fue a la otra parte haciendo ruido para después dirigirse a otra y otra como si de muchas personas se tratasen.
