Murdoc's burning sensations, de las muchas bandas que Murdoc había tenido esa fue la única que triunfó. Y justo en ese momento se encontraban dando un concierto.
Lo único que podía escucharse era la música y los fans gritando o cantando sus canciones, de vez en cuando se oía gente gritando cosas como "los amamos", "son los mejores" y una que otra obscenidad, quienes se llevaban gran parte de esos comentarios eran el guitarrista principal y el bajista.
Y es justo entre toda la euforia y emoción del momento cuando desde primera fila un joven alto de cabello azul le grita al bajista: -¡¡HAZME 100 HIJOS!!-. Cosa que provocó que al bajista se le escapara una sonrisita, sabía que sus fans cuando se lo proponían podían ser bastante atrevidos y no es algo que le importara mucho en realidad. Su espectáculo siguió su paso y al cabo de un rato concluyó, el público empezó a irse y los miembros de la banda pasaron al "backstage" no sin antes despedirse.
El chico de hace rato se quedó un rato más esperando a que los integrantes salgan para pedirles un autógrafo y ellos en su lugar solamente estaban felicitándose.
-¡Eso es chicos, lo hicieron bien!
-Ese solo Bill, uff increíble como siempre.
-¿Escucharon lo que le gritaron a Murdoc?
-Ah sí, quien lo haya dicho vaya que está loco.
-Creo que fue un chico que estaba en primera fila, uno bien alto y cabello azul.
-¿Ustedes creen que siga aquí?
Ahora su conversación había pasado de reconocimientos y felicitaciones a solo hablar acerca del desconocido peliazul.
-Murdoc ¿Tú qué opinas sobre lo que dijo el niño?
-Tiene buenos gustos.- Respondió Murdoc -Bueno ya me voy, hasta luego.- Murdoc tomó sus cosas y se fue de aquel lugar.
Aunque tal vez a Murdoc se lo podía ver desinteresado sobre el tema, la realidad era otra. Había visto como era físicamente el chico y a decir verdad le había causado una gran curiosidad, no siempre te encuentras con gente de cabello azul.
Pero algo que no se esperaba para nada es que de un rincón saliera el joven de quién tanto hablaban.
-Ahh...ehh...hola.- El mencionado habló asustando un poco a Murdoc, quien le devolvió el saludo.
-Hey pero a quien me encuentro, un fan jaja. Que quieres.- Dijo Murdoc secamente, y luego vio muy atentamente como el chico sacaba algunos cd's de la banda y un marcador.
-¿M-me podrías dar un autógrafo? Si quieres claro...
-Vale.- Empezó a firmar esas cosas y cuando estaba por firmar el último le preguntó por su nombre. -Dime niño ¿Cómo te llamas?
-Ah eh yo...si e-eh me llamo Stuart.- Sonaba muy nervioso.
-Stuart...lindo nombre. ¿Aún quieres que te haga tus 100 hijos?- Murdoc le entregó el último cd ya firmado.
-¿Q-qu-é?- Sus nervios aumentaron a tal grado de sonrojarse y empezar a temblar.
-Si fuiste tú ¿no? El que gritó "hazme cien hijos".
-S-si fui yo...¡P-pero no estaba pensando en lo que...en lo que decía!
-Eres lindo, ¿no quieres ir a cenar algo? Muero de hambre.- dijo Murdoc poniéndose una mano en el estómago.
-¡Si! Digo si eh... está bien ¿Ahora mismo?- Murdoc en respuesta solo asintió con un gesto de obviedad. -¡Bueno!, vamos.
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No sé, escribir esto es divertido xd
