Capítulo 5✔️

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~Alba~

—Se fue hace unos minutos —digo con un tono tan helado como el viento de invierno.

—¡Mierda! —exclama en un susurro, casi inaudible para mis oídos, mientras se dirige hacia la puerta como si el tiempo se le escapara entre sus manos.

—Se ha ido. No vale la pena correr. Espero que algún día te des cuenta de quién es en realidad —le digo con seriedad, dando la espalda para dirigirme al baño. Pero antes de que pueda cruzar el umbral, él habla:

—Dile a Liliana que quiero hablar con ella —ordena con un tono autoritario, su voz llena de frustración.

Al entrar al baño, me encuentro con Lili sosteniendo el cabello de Nerys mientras ella deja todo lo que tiene en el estómago en el retrete.

Me posiciono junto a Nerys y le quito el cabello de las manos a Liliana para sostenerlo con delicadeza.

—Lian quiere hablar contigo —le informo, intentando suavizar la tensión en el aire.

Ella sale disparada por la puerta del baño como si una tormenta la persiguiera, dirigiéndose hacia la sala.

<<Lian es un estúpido>> digo para mí y vuelco los ojos.

Mientras tanto, Nerys sigue vaciando su malestar en el inodoro. Con ternura, paso mi mano por su espalda, tratando de ofrecerle un poco de consuelo mientras espero con paciencia que la tempestad pase.

~~~

Liliana:

Llegué al salón y me encontré con mi hermano, cuya cara era un muro de frialdad, mirándome fijamente como si pudiera leer mis pensamientos.

—¿Por qué? —pregunta, dejándome completamente desorientada, como un barco a la deriva en un mar de confusión.

<<¿Ahora que quiere?>> pienso frustrada y confundida.

En mi rostro debe haber una expresión que delata mi desconcierto. Él se exaspera antes de continuar:

—¿Por qué dijiste eso sobre Elen? —pregunta, esforzándose por calmarse, como si respirara profundamente para no estallar.

—Porque es lo que siento. ¿Algún problema con eso? —replico con seriedad, sintiendo cómo la frustración comienza a aflorar en mí.

—Sí, muchos. Si se supone que no la soportas, ¿para qué la invitaste? Ella no tiene que aguantar tus niñerías —responde, su voz cargada de indignación.

<<¿Es en serio lo que estoy oyendo?>>

—Porque si no venía ella, no ibas a aceptar —le reprocho cansada, mientras él se dirige a la cocina y yo lo persigo. No pienso dejar la conversación así.

En mi mente pasan mil pensamientos y, aunque podría admitir que lo que siento son celos, no es la verdad completa. Mi hermano ha tenido otras novias, pero ninguna ha sido como esta.

<<No puedo creer que vayamos a discutir por ella>>

Desde el momento en que vi a Elen por primera vez, su aura me resultó opaca y su energía me incomodó. No la quería como novia mi hermano.

Acordes del destino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora