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LA JOVEN OBSERVA ATENTAMENTE A SUS TRIBUTOS DE ESTE AÑO PARA LUEGO ALEJAR SU mirada debido a que ambos siguien siendo demasiado jóvenes y tienen una vida por delante, pero estaban ahí peleando por sobrevivir y es probable que no puedan ganar debid...

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LA JOVEN OBSERVA ATENTAMENTE A SUS TRIBUTOS DE ESTE AÑO PARA LUEGO ALEJAR SU mirada debido a que ambos siguien siendo demasiado jóvenes y tienen una vida por delante, pero estaban ahí peleando por sobrevivir y es probable que no puedan ganar debido a que son demasiado jóvenes y los tributos de este año se veían muy amenazantes sobretodo los del distrito uno y dos.

- ¿Qué atormenta tu linda cabeza? - dice Finnick besando su frente

Ella baja la mirada.

- No creo que vayan a sobrevivir - susurra

- Luna, escucha se que aún es difícil, pero haremos todo lo posible para que sobrevivan como lo hicimos el año pasado, como lo hice contigo - dice viéndola fijamente

Ella asiente con la cabeza, pero aun así tenía cierta corazonada donde sus tributos no saldrán de la arena de los juegos ese año.

- Hola corazón - voltea viendo a Haymitch - Y Finnick-

- Haymitch, amigo mio ¿Como estas? -

- Menos ebrio - dice con tranquilidad - Los veo muy tensos -

- Los tributos del distrito uno y dos se ven muy amenazantes, más de lo usual -

- Quizás su cuerpo esté trabajado, pero no su cabeza - trata de animar el rubio menor

Voltea para ver a los tributos del distrito uno y dos, sobretodo los de distrito dos debido a su mirada debido a que ven al resto como... Su presa, como si cada uno de ellos fuera un pequeño cordero y ellos eran los lobos que los van a cazar en cuanto vayan a entrar a la arena.

- Dan miedo - dice Johanna abrazando a la pelinegra por los hombros - Eso escuche, se ven iguales que sus mentores -

Cashmer y Glimmer se ven idénticos con ese cabello rubio además de su belleza física aunque quizás la personalidad sea diferente.

A lo lejos Peeta sonríe con la mejillas rojas al ver a lo lejos a Luna quien observa a su mentor así que en seguida se le ocurre la idea de poder conocer a la joven mejor.

- ¿Por qué sonríes de esa manera? - pregunto Katniss

- Es Luna Cresta, ella es asombrosa - responde

- Es igual que el resto de los profesionales, es la favorita así que quizás sea igual que las personas de aquí-

Katniss creía que la joven Cresta era igual que cualquier chica que creció en el Capitolio debido a su estándar de preferencia al igual que sus privilegios como vencedora de los juegos del hambre.

En cambio Luna tenía la mente en las nubes, se sentía de cierta manera bastante frustrada ya que todos le decían que debía de acostumbrarse a ver como niños mueren en la arena como una manera de entretenimiento solo para que uno de ellos pueda vivir y aun con eso sufren como ser vendidos.

No quería acoplarse a esa vida, quería algo diferente y no ver como año con año niños morían de las maneras más crueles posibles, como hombres discuten para ser los primeros en aprovecharse de la inocencia de ellos, como les dan regalos como una manera de convencerlos de hacerlo de nuevo y estaba tan cansada de eso porque a pesar de que todos comparten su inconformidad nadie puede ser capaz de entender su deseo de un cambio aunque se escuche imposible y en su lugar solo le dicen que se adapte.

Había ciertos momentos con los que realmente nadie podía entender aquel deseo que podría sonar demasiado descabellado, pero ella lo quería hacer realidad aunque no sabía por dónde empezar y era algo frustrante, su madre una vez dijo que en eso se parecía a su padre un hombre con grandes ideas, pero quizás muy poco convencionales para algunos, era un soñador como ella.

- Conozco ese rostro - susurra Mason a su lado - No te diré que debes de calmarte y darte el típico discurso de que tus ideas son locas, pero realmente no hay que arriesgarnos Luni, porque si damos un paso en falso tendremos un horrible final o dejarnos solos -

Johanna negó ser vendida como un pedazo de carne y eso hizo que mataran a su familia, Haymitch uso la arena a su favor para ganar sus juegos algo que lo vieron como una burla hacia el capitolio provocando que también maten a su familia.

- Es solo... - enterró sus uñas en la palma de su mano - Estoy harta, de esto, son actos tan crueles y me siento tan impotente al no poder hacer nada para evitarlos, me sientó débil -

- No eres débil Luni, eres fuerte - afirma la joven

En esos momentos deseaba poder estar en privado para poder besar sus labios, pero si lo hacía estando ahí las pondría en peligro porque pueden usar la una a la otra para amenazar a ambas, algo que quiere evitar ya que Luna es lo único que le queda desde la muerte de su familia, no se arriesgara a perderla.

- No lo suficiente - susurra para luego caminar hacia Breck su tributo masculino más joven

El pequeño rubio se colgó básicamente de la pelinegra, a pesar de que ella misma se prometió no hacerlo aquel niño tan encantador pudo entrar en su corazón además a Finnick le agradaba ya que era como verla con su futuro hijo.

Un niño con cabello rubio como el suyo, ojos azules como los de Luna y siendo básica como ella siempre dulce, amable, quizás con algo de su encanto o sentido del humor, pero en sí sería como su madre.

En cambio Johanna esperaba una niña idéntica a Luna en todos los aspectos posibles aunque también le gustaría que tuviese su carácter fuerte ya que su difunta madre tenía una personalidad igual a la suya.

En cambio Luna, ella no quería hijos ¿Como podría? Traer un niño a un mundo donde los obligan a pelear con otros, donde no importa si ganas o pierdes al final ya no tienes algo que era parte de ti, ya no te vez igual cuando sobrevives a los juegos.

No, no condenaría a un niño a ese destino y menos a un niño que fuera suyo, velar sus sueños cuando tenga pesadillas o verlo morir a manos de otro.

𝐎𝐂𝐄𝐀𝐍 𝐄𝐘𝐄𝐒ᵗʰᵉ ʰᵘⁿᵍᵉʳ ᵍᵃᵐᵉˢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora