Fuertes brazos de rugby (Heartstopper)

Capitulo XXXII- Campamento (1/4)

El campamento de verano no había sido para Nick lo que había esperado.

Había pensado que invitar a su novio a un campamento mixto de deportes-artistico era la mejor idea del mundo. Se imaginaba tres semanas increibles practicando su deporte favorito en el dia mientras Charlie disfrutaba tocando su música  y teniendo acaloradas sesiones de sexo con su novio cada noche en su dormitorio.

Sin embargo, parecía que Charlie no pensaba lo mismo y había desarrollado una especie de paranoia.  Parecía que estar rodeado de tantos chicos desconocidos con todo ese nivel de testosterona había hecho revivir ciertos traumas del pasado de Charlie.

"¿Que pasa si nos escuchan? Creo que viene alguien. No me toques en frente de todos. Nos van a descubrir"  decía insesantemente.

A pesar de que Nick se había esforzado en hacerle entender que a nadie le importaría si se dieran cuenta que estaban juntos, sus esfuerzos habían sido infructuosos. Por si fuera poco, les habían asignado un dormitorio compartido con otro par de chicos, por lo que era casi imposible tener momentos de privacidad.

La noche anterior, por ejemplo, mientras sus compañeros de habitación estaban fuera en una reunión en otra cabaña, habían comenzado a besarse debajo de las sábanas de la cama de Nick, pero Charlie lo empujó fuertemente después de escuchar que alguien estaba tocando la ventana.

Pero en realidad había sido la rama de un 'maldito árbol' rasgando el cristal.

Como quiera que fuera, Charlie se había preocupado demasiado de ser descubiertos así que le aseguró a Nick que  lo mejor era dejarlo para cuando tuvieran menos peligro.

Por Dios, menos peligro, pensó Nick.  Toda la escuela sabía que eran novios, sus padres, sus hermanos y sus amigos lo sabían y Nick no entendía porque era tan malo si lo sabían en el campamento...

Y lo peor es que Nick se encontraba desesperado. Pareciera que sus hormonas adolescentes habían tomado posesión de su cuerpo y no le dejaban dormir en paz durante las noches. Pero no le insistiría a su 'no-novio', como había bautizado a Charlie, y utilizaría tácticas un poco más astutas para lograr aunque sea una salvaje sesión de besos con quien se suponía debía poder manosearlo cuando le diera la gana...

***

"¿Qué hora es?" Preguntó Charlie tirando de las mantas para cubrir su cabeza "Me estoy congelando ¿no pudiste siquiera cubrirme con las sábanas?"

'Lo habría hecho si me dejaras tocarte' Pensó Nick y después le contestó:

"Es poco después de las ocho. Y no."

Charlie gimió.

"Despiértame cuando sean las nueve"

"No puedo. Se supone que debemos reunirnos a las nueve en el centro para realizar alguna actividad que vamos a realizar hoy" respondió Nick

"Pueden comenzar sin mí" dijo Charlie dandose la vuelta con toda la intención de seguir durmiendo.

Nick se levantó de la cama, caminó hasta a cama de Charlie  y de un jalón quitó las mantas de encima de su no-novio.

"¡Hey! ¡¿Qué demonios?!" protestó Charlie al verse descubierto y luego sentir como Nick sacaba el celular que siempre guardaba debajo de la almohada y lo lanzaba al otro lado de la habitación sobre las mantas de la otra cama.

"Quiero hacer algo..." comenzó a reír cuando vio la mirada medio furiosa y medio somnolienta que Charlie le lanzaba "Te lo voy a devolver... pero tiene precio" dijo con una media sonrisa.

"¿Qué precio?" preguntó Charlie malhumorado. No era de las personas madrugadoras.

Nick se encogió de hombros.